Bernhardt, Florencia M.E. (2004) - Género y discurso.pdf

8/11/2019 Bernhardt, Florencia M.E. (2004) - Gnero y discurso.pdf

1/27

UNIVERSIDAD DE CIENCIAS EMPRESARIALES YSOCIALES

Informe final

Ttulo: Gnero y discurso

Investigadora: Prof. Florencia M. E. Bernhardt.

[email protected]

Fecha: Julio 2004.

A lo largo de este trabajo se tomaron diversas problemticas del lenguaje a partir de la escuela

francesa bsicamente y otras afines; luego se trabaj con los modelos funcionalistas interactivos

de los modelos norteamericanos con la intencin de encontrar la conceptualizacin de sujeto

lingstico o discursivo del gnero, especficamente, el sujeto "mujeres".

Las problemticas tericas abordadas fueron:

Teoras del signo en la tradicin francesa y en la tradicin rusa.

Teoras de la lingstica y anlisis del discurso tradicionales, especficamente con los

aportes de la lingstica, el psicoanlisis y la antropologa.

La teora de la comunicacin, el campo de los estudios sobre la mujer en la tradicin

filosfica-antropolgica estructuralista y post estructuralista, lecturas crticas del

psicoanlisis francs y el deconstructivismo, teora del gnero y teoras del gnero en el

cine (gendery genre).

La teora pragmtica sobre los actos del lenguaje: Implicaturas lgicas y conversacionales.

El decir y el hacer del lenguaje. El contexto como productor del discurso.

La tarea realizada es limitada respecto del campo tan amplio de los estudios de la lengua y del

discurso durante el siglo XX y los comienzos de ste. En este sentido la tarea, que acaba de

1
mailto:[email protected]:[email protected]


2/27

comenzar, ha consistido en revisar el campo de la lengua y el discurso a partir de una seleccin

de problemticas especficas y representativas. Quedan por observar otras corrientes y sus

relaciones con otras disciplinas1. En trminos amplios, se puede afirmar que no hay corrientes

del lenguaje ni del discurso que conceptualicen, en trminos de preocupacin y de problemtica

epistmica, un sujeto del lenguaje como se ha tratado de formalizar en este trabajo. Losobjetivos de este trabajo se extienden, por su diversidad y problemtica, a trabajos posteriores,

una vez asentadas las bases hay que pasar a las metodologas. S se describen actitudes

respecto del lenguaje de las mujeres a partir de categoras que provienen de la sociologa y de

la psicologa, pero no del lenguaje en s mismo. Tambin se han encontrado metodologas para

el estudio de las conversaciones y la construccin del poder patriarcal que atraviesa todos los

intercambios, pero son metodologas que trabajan sobre muestras, es decir, construcciones

empricas que se quedan en el campo de la demostracin y no llegan a conceptualizar la

problemtica que nos ocupa.

Se han encontrado estudios especficos en lo que concierne al lenguaje cinematogrfico 2, se ha

trabajo en la lectura, sntesis, anlisis y traducciones. Es interesante notar que todos estos

estudios parten de las mismas fuentes de las que parti esta investigacin, es decir, los

recorridos parten del lingista suizo Ferdinand de Saussure, del antroplogo francs Claude Lvi

Strauss y de las conceptualizaciones del inconsciente de Sigmund Freud para demostrar la

imposibilidad desde el piso terico de formular cuestiones de lenguaje cinematogrfico (pictrico

y lenguaje de imgenes) que dieran cuenta de la diferencia sexual, de la misma manera que

sucede en las formulaciones lingsticas y discursivas, no hay posibilidad de encontrar el sujeto

del gnero. Estas teoras y discusiones, entonces, arman un programa de revisin, crtica ysntesis que podra ser formulado brevemente de la siguiente manera:

La mujer en el cine no puede asumir su subjetividad sino que, como sujeto espectador, ocupa un

lugar de pasividad, de espectador femenino; M. A. Doanne afirma (junto con Teresa de Lauretis,

Ann Kaplan y otras) que la mujer, en el cine clsico de Hollywood est privada de mirada y

despojada de subjetividad para ocupar el lugar de objeto del deseo escoptoflico masculino, como

sostiene tambin Laura Mulvey. Hay algo en la representacin de la mujer en el cine que es

resistido por el marco cinematogrfico, que limita el acceso de la mujer a la narrativizacin, para

ser fcilmente espectculo. La mujer es vista como espectculo, como imagen, en oposicin a la

lnea narrativa. El hombre se desplaza en la narrativa mientras que la mujer se despoja de su

1Tarea que se contina realizando en la Maestra de Anlisis del Discurso de la U.B.A., y que dar pi para latesis de maestra en la Fac. de F. y L., lugar en el que, sorprendentemente, no existen estudios especficos osistematizados de este tipo sino que todas las referencias que se hacen son aleatorias y solicitadas por algunaspersonas interesadas en la problemtica.2Las autoras consultadas para esto son Laura Mulvey, Mary Ann Doane, Elisabeth Cowie, Teresa de Lauretis y

Ann Kaplan, entre otras (se citan abajo).

2


3/27

subjetividad, el hombre es el hroe, asume cualquier posicin en la narrativa mientras que la mujer

es relegada a lmites narrativos muy precisos.

Este planteo significa, entonces, sealar un lugar posible para la mujer que no est determinado

por la mirada masculina que la ubica como objeto de su deseo. Si el cine clsico ha ubicado a la

mujer como objeto ms que como sujeto de la representacin, esta construccin de objeto,conformada por distintas prcticas y disciplinas, no hace ms que poner de manifiesto que la

representacin clsica en el cine fue una consecuencia de los modelos preexistentes, denominados

patriarcales en trminos amplios y que algunas de las consecuencias que estas conceptualizaciones

produjeron fue el lmite de la representacin de las mujeres, de hecho, representada como objeto

de la mirada masculina. Esto significa, segn los estudios de gnero y de mujeres en el cine, que la

imposibilidad de estudiar las diferencias sexuales y culturales entre hombres y mujeres y las

diferencias entre mujeres estuvo instalada en la misma categora de mujer producida por el

patriarcado. Hoy, una vez establecida la crtica, se hace necesaria la bsqueda de categoras

pertinentes para la conceptualizacin.

Estas conclusiones establecidas por los estudios de mujeres en el lenguaje cinematogrfico son

reiterativas a las que se han sealado a lo largo de la investigacin, por lo que es evidente que

el problema del sujeto y de la representacin del sujeto proceden de los parmetros culturales

antagnicos ya mencionados y que se sintetizan de la siguiente manera:

1 parte: el objeto sin sujeto.

Para las teoras del signo de la tradicin filosfica no hay sujeto del signo en tanto unidad mnimade la significacin, sino objeto, representado en el signo. El signo es una cosa que representa a

otra cosa. En estas concepciones del lenguaje si el acento recae sobre el objeto se trata de una

teora "realista", si cae sobre el sujeto, ser "nominalista". La posicin realista identifica la

representacin con el referente, de tal modo que el signo es el nombre de la cosa 3. La

representacin es transparente. La posicin opuesta, el nominalismo, acenta la representacin con

relacin al sujeto. El acto de representar significa constituir un significado para el sujeto, y el signo,

as, es opaco respecto de la cosa. Surge una reflexin sobre la estructura de los signos, algo que no

existe en el realismo y se considera a la representacin como independiente de la cosa y

dependiente del sujeto.

3Este problema est referido en el verso inicial de "El glem" de Borges: "Si (como el griego afirma en elCratilo) / El nombre es arquetipo de la cosa, / En las letras de rosaest la rosa / Y todo el Nilo en la palabraNilo. / ..." .

3


4/27

De Saussure, en cambio, pasa por alto el problema de la representacin y privilegia la cuestin

semiolgica, es decir, suspende el problema de saber si la representacin atae al sujeto o al

objeto y reflexiona acerca del hecho simple de que la gente habla.

La teora saussuriana estudia el signo lingstico como formulacin de una estructura. Es una teora

diacrtica, relacionista, cuyas dualidades, que atraviesan todos los conceptos, se suponen

recprocamente. El objeto propuesto es la lengua, opuesta a un aspecto emprico, individual, el

habla que va a dejar afuera del estudio, es decir, la actividad lingstica (de los sujetos), que

considerar aleatoria, accesoria.

Con la separacin de estos aspectos De Saussure va a dejar caer en el habla la subjetividad

individual que queda, entonces, descartada, y la lengua va a constituirse en un principio de

clasificacin.

Para De Saussure la lengua constituida en un sistema cerrado (en el sentido de autosuficiente) e

inmanente, se compone de unidades llamadas signos, que no relacionan ningn objetoo cosade larealidad con una palabra sino que "lo que el signo lingstico une no es una cosa y un nombre sino

un concepto y una imagen acstica"4, y el lazo que los une es arbitrario, en el sentido de

inmotivado. La arbitrariedad y la diferencia constituyen el punto de sustentacin de su postura

semiolgica. La relacin de los signos entre s es de carcter opositivo, diferencial y adquieren valor

en el sistema mismo. De la misma manera que no hay ideas que preexistan a las palabras (en el

sentido de una nomenclatura), los valores de los signos estn establecidos por el sistema

lingstico. La significacin del signo proviene, por un lado, de la relacin de los aspectos

significante y significado, y por otro, proviene de la relacin del signo con los otros signos del

sistema; es decir, no proviene de las relaciones entre sujetos, aunque considere que es la masa

parlante la que mantiene viva a la lengua.

Patrizia Violi5sostiene que la cuestin del sujeto es el nudo central para la reflexin en los estudios

de mujeres puesto que no se puede reflexionar sobre el lenguaje sin presuponer una teora del

sujeto a partir de la diferencia. Su punto de partida para la reflexin es que una teora del lenguaje

es una teora del sujeto, tanto para los lenguajes representacionalistas, cuya funcin es servir de

instrumento para la expresin del pensamiento, como para los lenguajes de base comunicativa,

como es el caso de la escuela francesa del discurso. En el caso de De Saussure, al ser la lengua el

objeto fundamental y el nico posible de reflexin, relega el habla al dominio emprico, por lo quele impide constituirse en materia de reflexin o conocimiento cientfico. La constitucin del objeto

de la teora saussuriana marc su propio lmite y descart al sujeto de la constitucin del lenguaje.

4De Saussure, F; op. cit., p. 128.5Violi, P., "Sujeto lingstico y sujeto femenino", en Feminismo y teora del discurso, Madrid, Ctedra, 1990,Giulia Colaizzi ed.

4


5/27

De esta manera queda asignada la nocin de habla o paroleal dominio emprico del individuo, es

decir, fuera de la teora de la lengua o langue, nocin que pertenece al sistema como categora de

objeto que no puede "ser incluido en el sistema lingstico, que se organiza como una estructura

inconsciente, determinada social, pero no subjetivamente. El sujeto hablante y su consciencia

lingstica no encuentran as ningn espacio dentro de la teora, que hipotetiza una lingstica delhabla pero luego no la desarrolla, casi preguntndole su pertinencia a disciplinas vecinas como la

psicologa o la sociologa."6

Otra consecuencia advertida de esta conceptualizacin vaca de sujeto es que en s misma marca el

lmite de la teora del signo y la imposibilidad de pasar a una teora del discurso en tanto el blanco

del sujeto impide llegar a la frase, lugar de laparole. Al no existir sujeto no existe sintaxis y la frase

se limita al sintagma.7

2 parte: la aparicin del sujeto de la lengua.

En 1969, Emile Benveniste8 retoma la preocupacin de una ciencia de los signos, a partir de la

pregunta por el estatuto de la lengua entre los sistemas de signos. Benveniste, en su inters por

situar a la lengua, va a trabajar sobre la nocin de sistema y sobre los principios que afectan a las

relaciones entre sistemas semiticos. El primer principio dice que no hay redundancia entre

sistemas semiticos, es decir, cada signo significa en el interior de su propio sistema (no se puede

decir lo mismo con msica que con palabras). De este principio se desprende otro que dice que el

valor de un signo se define en el sistema que lo integra porque no hay signo transistemtico (el

significado del color del semforo no tiene nada en comn con el de una vestimenta o una

bandera). Pero que los signos no sean convertibles ni transistemticos no implica que no serelacionen entre s. Los sistemas semiticos no pueden ser interpretados por s mismos pero s

pueden ser interpretados por otro. Este lugar va a estar asignado a la lengua. La lengua va a ser el

sistema interpretante por excelencia de todos los sistemas semiticos de la sociedad. Entonces, la

lengua sostiene un principio de jerarqua en la clasificacin de los sistemas semiticos. La sociedad

es el interpretado de la lengua. La razn por la cual la lengua es el sistema semitico interpretante

de todo sistema significante se debe a que la lengua est investiga de una doble significancia:

semitica y semntica, es decir, la significancia del signo como elemento de lengua. Lo semntico

corresponde al modo de significar de las relaciones entre las unidades o los elementos de un

discurso, que requieren de la referencia. Cada discurso crea su propio sentido, y este sentido no se

produce por la suma de signos sino que es concebido globalmente. La significacin es producida a

6Violi, P., op. cit., pg. 129.7Ser la gramtica generativa, fundada en datos lingsticos sobre la actividad del sujeto, la que se ocupe dela sintaxis del sujeto, que se constituir finalmente en el sujeto del enunciado y no de la enunciacin; pero suorganizacin comporta otras dificultades que exceden momentneamente los lmites de este trabajo.8Benveniste, E.; "Semiologa de la lengua" en Problemas de ligstica general, Mxico, S.XXI, 1978, tomo 2.

5


6/27

partir de una relacin entre sujetos llamada la enunciacin, proceso mediante el cual la emergencia

del sujeto en la lengua que se manifiesta en el enunciado. Este modo de significacin debe ser

comprendido, interpretado (a diferencia del primero que debe ser reconocido), y es abordado por el

anlisis del discurso.

La postura de Benveniste de instalar la subjetividad es en contra de una nocin de lenguajeutilitaria y nomenclaturista que se desentiende de la problemtica de la constitucin del sujeto. Se

trata de la subjetividad lingstica que se determina porque cada locutor se pone como sujeto,

como ego, y plantea otra persona "t" a la que le habla. En la enunciacin el sujeto se manifiesta

discursivamente al apropiarse de la lengua en un acto de realizacin individual. Se instala como

locutor (yo) e instala a un otro bajo la forma de t. La presencia del locutor en la enunciacin hace

que cada instancia del discurso se constituya en un centro de referencia internamanifestada por

formas especficas (deixis) y procedimientos accesorios (en trminos amplios, la modalidad).

El carcter lingstico de la subjetividad queda demostrado a travs de tres argumentos sobre la

representacin de la persona, el tiempo y el espacio en el discurso.

Los sealamientos a la conceptualizacin de sujeto que promueve Benveniste y de ah en ms la

lingstica de la enunciacin, son de distintos rdenes, en principio, supone la idea de sujeto

universal, es decir, el proceso de subjetivizacin de la lengua se lleva a cabo sin mediar las

condiciones de produccin de gnero. El yo que instaura un t no manifiesta otros rdenes

culturales en el proceso de la subjetivacin, especficamente, la diferencia; el principio de la doble

significancia de la lengua, semitica y semntica, toma, sin descartar, el nivel de lengua como

objeto heredado de la tradicin estructuralista, vaco de sujeto, por lo que la emergencia de la

subjetividad resulta de una herencia negadora del sujeto, aunque Benveniste recompone los planosde la lengua y del habla a travs de la nocin de enunciacin; tambin Benveniste sostiene la

enunciacin en el dilogo interrelacional entre yo y t unvocos, sin considerar diferencias de

gnero; por ltimo, si el principio que establece que la sociedad es el interpretado de la lengua, es

decir, que la lengua articula los dems sistemas semiticos de la cultura, qu lugar social se est

asignando a una significacin que no contempla las diferencias de gnero?

El planteo de Benveniste en lo que respecta a la idea de sujeto resulta abstracto, es decir, universal

y general, en el sentido de que remite a los presupuestos tericos de la filosofa husserliana: "en

sta todo acto significante es el resultado de una conciencia fundada en el yo trascendental; el

discurso y el sentido siempre derivan de un juicio, de un acto de predicacin del sujeto que `se

pronuncia sobre algo. El objeto se construye por la conciencia, que es conciencia juzgadora de un

yo trascendental (...) que coloca al mismo tiempo al objeto y al sujeto: segn Husserl es

efectivamente la consciencia la que constituye objetividades exteriores; de hecho, el objeto existe

slo en el momento en el que el yo, en cuanto principio sintetizador, le permite existir a travs de

6


7/27

un acto de juicio..."9. Este yo homogneo, en el sentido de que no puede ser un sujeto

diferenciado, no puede, por lo tanto, expresar la significacin heterognea, "no podr expresar

nunca un sujeto sexuado, dado que su trascendencia la constituye como instancia universal y

abstracta, fuera del mbito de lo diferenciado."10

El propio Benveniste sostiene11

: "La `subjetividad que aqu tratamos es la capacidad del locutor deplantaerse como `sujeto. Se define no por el sentimiento que cada quien experimenta de ser l

mismo (sentimiento que, en la medida en que es posible considerarlo, no es sino un reflejo), sino

como la unidad psquica que trasciende la totalidad de las experiencias vividas que rene, y que

asegura la permanencia de la conciencia. Pues bien, sostenemos que esta `subjetividad, pngase

en fenomenologa o en psicologa, como se guste, no es ms que la emergencia en el ser de una

propiedad fundamental del lenguaje. Es goquien diceego. Encontramos aqu el fundamento de la

`subjetividad, que se determina por el estatuto lingstico de la `persona".

Seala Violi que en los presupuestos filosficos de la teora de la enunciacin, es decir, en la nocin

de sujeto no diferenciado y la de homogeneidad de sentido que reducen a la unidad el objeto

transcendental, se hace evidente la imposibilidad de constituir un sujeto en devenir y, entonces,

posibilitado de expresar la diferencia. El sujeto, al ser un universal abstracto, queda excluido de la

realidad de cada hablante, particularmente de la experiencia y de la individualidad.

Otro gran terico de la semitica, Greimas, va a trabajar la nocin de enunciacin con algunas

precisiones y diferencias con Benveniste, quien consideraba un sujeto del discurso que se

manifiestaba a partir de las formas del yo.

En La enunciacin, una postura epistemolgica12, Greimas va a explicar que el proceso de

enunciacin presupone lgicamente la existencia de un sujeto. La enunciacin es un acto quesiempre comunica, es un enunciado. El enunciado es la frase lingstica, el sintagma ms

elemental, lo que est dicho o escrito y es comunicado. Tiene una estructura elemental de sujeto,

verbo, objeto. Para que el enunciado sea enunciado es necesario que se lo enuncie, es decir, se

necesita de la enunciacin, y si existe el proceso llamado enunciacin, esto presupondra la

existencia de un sujeto de la enunciacin (y de un enunciatario). Greimas va a afirmar que no se

puede hablar de enunciacin sino en la medida en que est enunciada. Se puede conocer algo de la

enunciacin porque conociendo la estructura del enunciado se puede presuponer lgicamente la

presencia de otros elementos de la enunciacin. La presencia del objeto implica la presencia del

sujeto y la relacin entre ambos es una funcin.

9Violi, P., op. cit., pgs. 133-4.10Violi, P., op. cit., pg. 134.11Benveniste, E., "De la subjetividad en el lenguaje", en Problemas de lingstica general, Mxico, Siglo XXI,1985, pgs. 180-1.12Greimas, A. J.; La enunciacin, una postura epistemolgica, Puebla, Universidad Autnoma de Puebla,Cuadernos de Trabajo 21, 1996.

7


8/27

Greimas parte de considerar, entonces, que la enunciacin es un enunciado, y que si uno de los

trminos es conocido, el otro puede ser deducido lgicamente. La enunciacin slo puede ser

conocida en trminos de presuposicin lgica.

El sujeto de la enunciacin es un sujeto lgico pero, afirma Greimas en el artculo citado, fue

conceptualizado por la lingstica, la literatura y la filosofa como un sujeto ontolgico, es decir,como un sujeto exterior al lenguaje.

"La actitud del lingista es decir, con Saussure, que el discurso, el texto, en la medida en que est

manifiesto, es la sola realidad de la cual la lingstica se ocupa. Y entonces ella dice todo lo que

quiere decir a propsito de ese texto manifiesto, pero la lingstica dice que ella no pretende que

no existan, aparte, otras realidades. Si la lingstica tiene un proyecto de investigacin coherente

debe atenerse a l y a lo que puede hacer. No se trata de un hombre universal. Ocurre que, como

la ciencia se ha erigido en un punto de vista sobre el mundo y no como en una exploracin, por

todos lados la ciencia se ha convertido en la medida del mundo. Cada ciencia es slo una

aproximacin al mundo. Por lo tanto, nosotros tenemos una manera propia de aproximarnos pero

all debemos detenernos."13

"(...) quin hablaen el discurso? Los diferentes yoque podamos encontrar en el discurso son yo

hablados y no son yo que hablan. Porque el yo de la enunciacin est siempre oculto, siempre

sobreentendido, lo cual es elemental."14

3 parte: el cuestionamiento al sujeto.

La afirmacin de Greimas acerca de la relacin enunciacin-enunciado va a ser retomada por H.

Parret para revisar algunas conceptualizaciones sobre la enunciacin. Para l la enunciacin ni esten el enunciado (segn Austin y otros) ni est presupuesta lgicamente (Greimas). La enunciacin

es un efectode enunciado, es el suplemento de un cuerpo (el enunciado) y su desciframiento se

har por transposicin:

"Que la instancia de enunciacin sea un efecto de enunciado no significa que toda la enunciacin

sea enunciada. Un efectode enunciado no est presente en el enunciado bajo forma de marcas o

sealadores morfo-sintcticos o semntico-sintcticos, sino que debe ser reconstruidoo descubierto

por un esfuerzo de interpretacin. Este esfuerzo de interpretacin que nos hace descubrir la

instancia de la enunciacin se refiere, en realidad, a una transposicin de sentido: se trata, en

cierta forma, del llenado de un espacio elpticopor una actividad deparfrasiso, para emplear el

trmino de Hjelmslev, de encatlisis."15

13Greimas, A. J., op. cit., p. 9.14Greimas, A. J., op. cit., p. 12.15Parret, H., Op. Cit., 1995, p. 38.

8


9/27

En La enunciacin y su puesta en discurso16, Parret va a dejar en evidencia la incertidumbre con

relacin al estatuto epistemolgico del discurso. En particular en el mbito del estructuralismo, el

discurso es el tercer trmino que subvierte las dicotomas 17. El discurso es un texto contextualizado

enunciativamente, no es un texto o un enunciado textual, "el discurso no es un texto enuncivo, sino

un texto enunciativo: la enunciacin es el contexto productor del discurso"18

El discurso ocupa un lugar de intermediacin entre la lengua y el habla y, a diferencia del habla,

posee regularidades tanto lingsticas como de distintos tipos discursivos. Los rasgos lingsticos

pertenecen a las posiciones del sujeto, espacio y tiempo (rasgos decticos) y a la modalizacin (que

manifiesta la actitud enunciativa del sujeto con respecto a lo dicho).

Los rasgos discursivos "comprenden el conjunto de principios, tipos, estructuras, en constante

transformacin e interdefinicin, que las diversas prcticas discursivas van generando. As, hay

principios, tipos y estructuras que caracterizan y definen, en un momento determinado, aquello que

una cultura reconoce, por ejemplo, como `discurso literario o como `discurso histrico, etc.".19

Parret proporciona siete exigencias epistemolgicas para delimitar el enfoque de la discursividad.

Para l el discurso est compuesto por una serie de caractersticas entre las que se encuentra la

dimensin histrica de un sujeto que se manifiesta temporal y espacialmente, al igual que

Benveniste, y tambin insiste en que las instancias de enunciacin puestas en discurso tienen su

fuente en la subjetividad enunciante. "No hay discurso sin sujeto (en tanto efecto de discurso), as

como no hay anlisis de discurso sin reconstruccin de las condiciones (subjetivas) de produccin y

de comprensin de los discursos."20. Hay discursividad en tanto hay subjetivizacin y

contextualizacinlingstica.

El sujeto as planteado centra la significacin con relacin a un sabery a un hacer(piensa, enuncia,afirma, despliega una actividad cognitiva). Las modalidades mediante las que se expresan las

competencias del hacer del sujeto (de su actividad) tienen que ver con el querer, el deber, el poder

y el saber hacer. En este sentido, las relaciones entre los sujetos de la enunciacin (enunciador y

enunciatario) supone una orientacin racional o consciente que descansa en la verdad o en la

veridiccin de la comunicacin.

"Es evidentemente exacto que, a travs del discurso, se crean ilusionesreferenciales y efectosde

verdad. El lenguaje no "calza" en la realidad como escritura "blanca", segn la expresin de Roland

Barthes: la escritura es una pantalla ms menos mentirosa destinada a ocultar la realidad y su

16Parret, H.; La enunciacin y su puesta en discurso, Cruzeiro Semitico n 6, 1987, mimeo.17"Es aqu, en efecto, donde hay algo delicado en la frontera de los mbitos de la lengua y del habla. Lafrontera de la lengua y del habla es cierto grado de combinacin" fragmento D 266, R. Godel, Les sourcesmanuscrites du Cours de linguistique gnrale, Pars-Ginebra, 1957, citado por Parret, H., op.cit., 987, p. 2.18Parret, H., op. cit., 1987, p. 3.19Filinich, M. I., Enunciacin, Bs. As., Eudeba, 1998, p. 30.20Parret, H., op. cit., 1987, p. 5.

9


10/27

verdad sub-yacente. Yo no estudiara, sin embargo, a travs de la problemtica de la veridiccin

cmo y en qu `el hombre est en su discurso".21

El sujeto, adems de constituirse en la esfera del hacer, tambin se constituye en el ser. La

semitica actual ha provocado un giro que consiste en pasar del terreno de la accin al terreno del

padecer, de la pasin, de la dimensin afectiva o sensible del sujeto. El sujeto en el discurso es unser de pasin, expresa su vida pasional, est investido de una competencia pasional que lo aleja de

la subjetividad intelectiva y lo acerca a la subjetividad afectiva, al sentimiento.

En la dimensin del ser del sujeto es donde se manifiestan las pasiones, que se organizan a travs

de una sintaxis de modalidades. El sujeto pasional que pone en escena el discurso, es sostenido por

el sujeto de la enunciacin declarativa de base de la enunciacin. Habr, entonces, una enunciacin

primera, desplegada por el sujeto de la enunciacin, y una enunciacin segunda que es la puesta

de las pasiones en el discurso. Esta segunda enunciacin "se configura no slo por la combinacin

de modalidades sino adems por otro componente, que Fontanille denomina modulaciones, y que

comprenden un conjunto de rasgos aspectuales y tensivos que acompaan a toda pasin. Las

modulaciones, al ser rasgos del plano de la expresin (son el estilo de una pasin), permiten

reconocer la presencia de tal o cual pasin. As, puede reconocerse al depresivo por la disminucin

en el ritmo de sus movimientos, o al ansioso por su agitacin."22

Se diferencian entonces, el sujeto de la pasin del sujeto del hacer. El sujeto de la pasin es un

sujeto de segundo grado porque procede o regresa de l. Otra diferencia es que la orientacin

"impuesta por la modalizacin es de sentido contrario: en tanto que la modalizacin del hacer es

presupuesta por el hacer (como orientacin retrospectiva), la modalizacin pasional es "proyectada"

frente al sujeto durante todo su recorrido, y determina su "devenir" ms que su "historia" (...); alcontrario de un sujeto pasional, el sujeto del hacer modalizado siempre debe "probarse" mediante

la accin antes de ser reconocido competente." 23

Las diferencias entre las posiciones de Greimas y de Parret quedan establecidas, para Parret es

inconcebible la idea de sujeto lgico porque el sujeto est determinado y es hablado por la pasin.

A pesar de que Parret considera un sujeto de la pasin y del saber que se manifiesta en un "ser" y

en un "hacer", estamos ms cercanos a las posiciones que plantean un sujeto con relacin a la

experiencia cultural pero no se marca la crtica con relacin a las diferencias de gnero, por lo que

es evidente que el cuestionamiento al sujeto es parcial y no constituye una base o exigencia

epistemolgica para la nocin de discurso. Adems, se conceptualiza como un sujeto inscripto en la

historia y en su individualidad que, en lo que respecta a la racionalidad, es heredero de la

epistemologa estructural. Es en la enunciacin de las pasiones en el discurso el lugar donde se

21Parret, H., op. cit., 1995, p. 37.22Filinich, M. I., op. cit., 1998, p. 108.

10


11/27

configuraran los rasgos de gnero, es decir, por los componentes de las modalidades y las

modulaciones, por el estilo de la enunciacin del sujeto? si las modalidades son universales y las

pasiones son inestables, estaramos formulando nuevamente caractersticas universales para ciertos

rasgos del sujeto y el lugar de la individualidad, el del surgimiento del gnero seguira siendo un

lugar de inestabilidad o de invisibilidad se trata de seguir buscando el lugar en el que estaranocultos los rasgos de gnero o se trata de un no lugar nuevamente?

4 parte: la interaccin verbal.

Otras corrientes del lenguaje que proceden de los estudios antropolgicos de Malinowsky, de

Jakobson y otros, y que se han instalado especialmente en E.E. U.U., van a trabajar a partir de los

70 y 80.

Robert de Beaugrande en "La saga del anlisis del discurso"24 pretende contar una historia que

ponga de relieve las principales ideas que facilitaron o impidieron el anlisis del discurso; trabaja a

partir de la crtica a las corrientes lingsticas que atravesaron todo el siglo 20, y cuando recoge los

aportes toma las corrientes que se inspiran en la antropologa mencionada arriba; segn l, los

estudios que realiz la lingstica no dan cuenta de lo que las personas hacen o piensan con

respecto a la organizacin del conocimiento del mundo y de la sociedad, los cientficos han hecho

que la lingstica del siglo 20 desconectara el lenguaje para estudiarlo en s mismo. Pero en la

realidad de los seres humanos hay discursos, es decir, acontecimientos comunicativos reales. Los

lingistas desconectaron el lenguaje creyendo que debera hacerse para crear una verdadera

ciencia sin preguntarse si poda hacerse.

El lenguaje fue dividido en varios dominios como la fonologa y la morfologa que desconectaron ellenguaje del discurso real y descubrieron un orden adyacente. La ciencia produjo algunas reglas

como

1- se debe estudiar un dominio del lenguaje por vez (fonologa, morfologa, sintaxis),

2- hay que describir cada dominio como un sistema de unidades tericas que correspondan a

unidades prcticas de los datos,

3- se debe describir cada unidad por los rasgos la distinguen,

4- la investigacin consiste en transcribir las expresiones, segmentarlas en unidades y clasificarlas.

El estudio de la sintaxis signific un viraje sobre no cules datos se estudian sino adonde se van a

buscar esos datos. Los mtodos de bsqueda fueron desarrollados por la lingstica de campo.

Otro mtodo es la lingstica casera que estudia un sistema de pautas y reglas subyacentes que

disponen y transforman los datos. Luego de tres dcadas no se encontr un sistema similar de

23Fontanille, J., "El giro modal en Semitica" en Morph 9/10, Puebla, Universidad Autnoma de Puebla, 1994,p. 64.

11


12/27

pautas y reglas subyacentes para ninguna lengua natural debido a que no se consider el

conocimiento de mundo y de sociedad para el hablante. Son los guardianes de la lengua -

conservadores de las formas-.

Recin la reconexin de la "ciencia del lenguaje" con el discurso se produce a partir de la

lingstica de los grandes corpora que describe datos autnticos de la lengua. Trabaja conordenadores y grandes bases de datos de discursos reales.

Tambin quienes no propusieron desconectar el lenguaje del discurso son la tagmmica

norteamericana, la Escuela de Praga y la Lingstica Sistmica Funcional de Gran Bretaa.

Hoy el anlisis del discurso es la contracorriente de lo antes esbozado, el lenguaje se define como

un sistema integrado con el conocimiento de los hablantes acerca del mundo y de la sociedad, es

decir, se describe en trminos lingsticos, cognitivos y sociales junto con las condiciones en las

cuales lo usan los hablantes mientras que antes el lenguaje era un sistema uniforme y estable

definido en sus propios trminos, con un orden subyecente ideal por debajo de la masa de datos.

El programa del anlisis del discurso estara conformado por disciplinas que pueden contribuir: los

lingistas con el mtodo de trabajo de campo sobre idiomas anteriormente no descriptos en lugar

del lenguaje en s mismo, la tagmmica, la lingistica sistmica y el anlisis del discurso25.

La escuela de Praga (Mathesuys, Firbas) consideran que lo que es inusual en una lengua puede no

serlo en otra. La PFO (perspectiva funcional de la oracin) de Firbas revel modos que antes eran

desapercibidos en los textos en lo que se refiere a la influencia entre texto y contexto para las

configuraciones de oraciones, el DC (dinamismo comunicativo).

El funcionalismo britnico (Firth, Halliday, Sinclair) estudi el lenguaje con relacin a lo que los

hablantes dicen. En vez de unidades discursivas y reglas pusieron nfasis en movidas discursivascomo iniciacin, nominacin y seguimiento en el maestro, y oferta y respuesta en el alumno.

Algunos desarrollaron el lenguaje como una red de opciones a las que se les asignan funciones

cuando se utiliza el lenguaje en el discurso (perspectiva reticular que considera que la organizacin

de una lengua est expresamente diseada para favorecer su utilizacin).

Otro contribuyente fue la sociolingstica que reconecta el lenguaje con la sociedad al estudiar las

variedades de la lengua que se corresponden con diferencias en la condicin social, regional y

econmica.

El programa ms detallado es el anlisis de la conversacin en la etnometodologa, que proviene de

la sociologa y desarrolla sus propios mtodos (Garfinkel, Schegloff).

24 Robert de Beaugrande en "La saga del anlisis del discurso" cap. 2, en El discurso como estructura yproceso, Teun Van Dijk Compilador, Gedisa.25Se trata de diferentes corrientes (hay otras que quedan generalizadas en la clasificacin de Beaugrande)que tienen en comn la idea de que no hay texto sin contexto, es decir que el discurso crea las condicionespara su interpretacin.

12


13/27

La lingstica textual toma esta leccin emprica al considerar texto en contexto, reconectaron los

textos con el conocimiento del mundo y de la sociedad de los participantes en el discurso,

desarrollaron el concepto de textualidad como logro humano en materia de hacer conexiones

donde quiera que tengan lugar acontecimientos comunicativos, no solo unidades tericas y reglas.

La disciplina del procesamiento del discurso constituye una transdisciplina (psicologa clnica yeducacional, sociologa del lenguaje, lig. computacional, etnociencia, etc.) para enfrentar problemas

desde mltiples puntos de vista. La pregunta cmo hacen las personas para procesar un discurso

durante la comunicacin real?: el procesamiento disea su propia serie de sistemas en lnea. La

reconexin del lenguaje con el conocimiento de la sociedad fue estudiado por la psicologa social.

El programa del anlisis del discurso tiene un objetivo difcil y elevado de obtener la totalidad de

una perspectiva transdisciplinaria para hacer conexiones. El anlisis del discurso se plantea no

limitarse a describir las prcticas discursivas sino en transformarlas en prcticas ms progresivas

bajo el marco de la ideologa del ecologismo, con programas multiculturalistas, sociales, lingsticos

y cognitivos.

En el estudio de la conversacin especficamente es Deborah Tannen 26 quien estudia el

conocimiento de convenciones lingsticas y comunicativas que los hablantes deben tener para

iniciar y sostener un involucramiento comunicacional, el conocimiento de convenciones de

procesamiento del discurso y normas comunicativas relacionadas que los participantes deben

controlar como precondicin para ser capaces de sostener una cooperacin conversacional, etc.27El

contexto metodolgico de su trabajo es el anlisis del discurso conversacional, es decir, se trata del

estudio de la lengua en uso, en situacin, su manifestacin. Para ella el estudio sobre gnero y

lenguaje es un campo interdisciplinario formado por especialistas procedentes de la antropologa, laeducacin, la sociologa, la psicologa, la comunicacin lingstica, la literatura, los estudios de

mujeres y, en grado menor, los lingistas. 28Para ella, el campo lingstico no parecera constituirse

en un espacio propio de investigacin previo al de los estudios interdisciplinarios por lo que toma

las nociones de lenguaje sin producir crtica, aparentemente. Su enfoque tendr una mirada

sociolingstica y antropolgica del gnero y del lenguaje.

26D. Tannen, Gnero y discurso, Barcelona, Paids, 1996.27

Los estudios conversacionales trabajan sobre procesos de interpretacin situados o limitados por elcontexto, en el cual los participantes de un intercambio evalan las intenciones de los otros, y sobre los cualesbasan sus respuestas. Las llamadas pistas de contextualizacin se detectan a travs del cdigo, el dialecto, losprocesos de cambio de estilo, los fenmenos prosdicos, las elecciones lexicales y sintcticas, las aperturas ycierres de los turnos de la conversacin, las estrategias de secuenciamiento, los signos rtmicos y fonticos, esdecir, vinculados a lo no verbal, etc.

28Est circunlando en este momento en Bs. As. el video de una charla/conferencia que ofreci D. Tanneh enE.E.U.U., el sbado 31/7 asistimos a la visualizacin de ese video y al debate posterior. Estainterdisciplinariedad que ella pretende signific, al menos en este video, una lugar de prejuicios y lugarescomunes que no dan cuenta de las diferencias de gnero en el lenguaje.

13


14/27

Aclara que no se interesa por la cuestin sobre los orgenes de las diferencias de gnero ni de otras

diferencias lingsticas -cuestiones que a nosotros nos han parecido fundamentales- y que

considera la socializacin o experiencia cultural como la principal influencia en la formacin de los

modelos de conducta. Los fenmenos de lenguaje a partir de los que trabaja son de lenguaje en

uso y no de fenmenos especficamente lingsticos: se trata de la implementacin de estrategiaspara el uso del lenguaje en situaciones rituales de conversacin, lo que supone un uso

transaccional del lenguaje y sus formas de dominacin.

Otros estudios de inters son los que se conocen como lingstica crtica y estilstica feminista. La

estilstica trabaja sobre la teora literaria y sobre la lingstica con la finalidad de producir anlisis de

los textos a partir de modelos lingsticos. Se apoya en los presupuestos procedentes de las teoras

de Chomsky, de Searle y de Halliday, entre otros autores. La revista Feminaria29tradujo y public

la introduccin del libro Feminist Stylisticde Sara Mills (Londres, 1995). En esta introduccin Sara

Mills explica que su intencin es cmo se representan los significados de gnero en la cultura.

Coincide en sealar que la mayora de los anlisis de gnero trabajan especialmente en anlisis de

contenido y no proveen estrategias, en el sentido de herramientas, para estudiar las

representaciones de las diferencias de gnero en los textos. Su propuesta que est precedida por el

trabajo de varios autores, entre ellos se destacan Bob Hodge y Roger Fowler 30. Estos autores,

procedentes de la sociolingstica pero fuertemente crticos de la disciplina, trabajan con tres

proposiciones sobre el modo de funcionamiento del lenguaje, la primera es que el lenguaje en uso

encarna enfoques especficos de la realidad, es decir, la estructura del lenguaje determina la

mirada sobre el mundo; la segunda es que el discurso est determinado por factores sociales y

polticos y sus variaciones "expresan activamente las diferencias sociales estructuradas que lasprovocan"31; la tercera por ltimo, es que el uso del lenguaje es parte del proceso social, por lo que

constituye significaciones y prcticas sociales en contextos interpersonales y sociales efectivos. El

lenguaje, para este grupo, es un mediador de las relaciones interpersonales y una fuerza de

perpetuacin de las relaciones sociales subyacentes. Las conexiones entre la estructura lingstica y

la estructura social son fuertes y omnipresentes, "... los agrupamientos y las relaciones sociales

influyen en el comportamiento lingstico (...), esas pautas socialmente determinadas del lenguaje

influyen en el comportamiento no lingstico, incluyendo, de manera decisiva, la actividad cognitiva.

La sintaxis puede codificar una visin del mundo sin ninguna eleccin consciente por parte de un

escritor o hablante. Alegamos que la visin del mundo les viene a los usuarios del lenguaje de su

29Feminaria, Ao XIII, N 24/25, noviembre de 2000.30La nmina de autores que menciona Mills en este trabajo es muy extensa, la mayora proviene de la llamadaLingstica critica (VV, Lenguaje y control) y de la sociolingstica en general.31R. Fowler y otros, Lenguaje y control, Mxico, F.D.C.E., 1983, prlogo.

14


15/27

relacin con las instituciones y de la estructura socioeconmica de su sociedad... De manera

similar, la ideologa est lingsticamente mediatizada..."32

Segn Alessandro Duranti33, La Etnografa del Habla estudia el uso del lenguaje tal y como se

presenta en la vida cotidiana de una comunidad lingstica concreta. Su mtodo es etnogrfico peroincluye la pragmtica, el anlisis de la conversacin, la potica y la historia. Estudia el discurso en

situacin, es decir, la actuacin lingstica es el lugar donde se emplaza la relacin entre el lenguaje

y el orden sociocultural.

En cuanto al contenido de la interaccin verbal cotidiana la etnografa del habla se interesa por la

relacin entre el uso lingstico y los sistemas locales de conocimiento y conducta social. En el

discurso tienen lugar la recreacin y transmisin de patrones culturales del conocimiento y de la

accin social. Esta corriente estudia qu es lo que se logra por medio del habla y cmo sta se

relaciona con aspectos de la organizacin social, valores, etc. Qu significados posee el habla en

situaciones sociales especficas. Sus interrogantes son cul es el objetivo del habla, qu

caractersticas del cdigo lingsticas garantizan su empleo en contextos, qu relacin hay entre un

ejemplo concreto y otras actuaciones.

En cuanto a la forma del uso cotidiano del lenguaje, estudia los modelos de variacin en distintos

contextos en una misma o distintas sociedades. Tambin en la interrelacin entre la estructura de

la actuacin verbal emergente y la culturalmente predecible en el desarrollo de la vida social.

La relacin entre etnografa del habla y sociolingstica es que esta ltima es el estudio sistemtico

del uso de la lengua en la vida social y por lo tanto la etnografa es un subcampo con diferencias

metodolgicas y tericas.

A partir de la lectura de los trabajos de la etnolingstica y de los estudios sobre conversacin que

se han realizado en el tramo final del proyecto, encontramos que los especialistas toman en

consideracin especial y estn determinados fuertemente34, adems de por los trabajos de Roman

Jakobson35 por de Valentn Voloshinov, lingista ruso, autor de El marxismo y la filosofa del

32R. Fowler y otros, Lenguaje y control, Mxico, F.D.C.E., 1983, pg. 247.33Duranti, Alessandro, "La etnografa del habla: hacia una lingstica de la praxis", Madrid, Visor, 1992, p.

225.34Es interesante sealar que la inmensidad de textos revisados en este tramo (Duranti, A, Silverstein, M,Golluscio, L, construyen las teoras para los estudios sobre comunidades, comunidades indgenas, marginadas,racismo, etc., a partir de los principios de Voloshinov, es decir, los avances, en este sentido, vuelven arealizarse a partir de dos tericos fundamentales que surgieron de Rusia: Roman Jakobson, vigente en laactualidad y Valentn Voloshinov. Los estudios ms actuales de etnolingstica y anlisis conversacionaldebieron retomar a partir de estos dos autores, no se encuentran, por ahora, elementos tericos que no sepuedan vincular con estos dos autores. Los aportes sobre el contexto y la interaccin surgieron netamente deeste campo.35Trabajado especialmente en la investigacin sobre discurso poltico en este Departamento, 2000/1.

15


16/27

lenguaje36quien va a plantear que para hablar de lenguaje es necesario ubicarlo en el terreno de la

comunicacin social organizada. Las condiciones indispensables para vincular los aspectos fsico-

psico-fisiolgico con el lenguaje son la unidad del medio verbal y la unidad del acontecimiento

social inmediato de la comunicacin.

Va a criticar dos corrientes lingsticas: el subjetivismo individualista (Humboldt, Vossler37

) y elobjetivismo abstracto (De Saussure). El primero analiza y subraya el acto individual y creativo como

el fundamento del lenguaje (entendido como conjunto de todos los fenmenos lingsticos), como

instancia psicolgica. El enfoque se reduce a 4 principios:

1- el lenguaje es actividad en construccin permanente,

2- las leyes de la creacin son individuales y psicolgicas,

3- la creatividad lingstica es consciente y anloga a la artstica,

4- el lenguaje como producto hecho es un sedimento muerto, una abstraccin.

La segunda corriente estudia la lengua como sistema a partir de diferencias sincrnicas, pero la

lengua, como todo acto creativo, est compuesta por enunciados individuales e irrepetibles que

tienen elementos idnticos a los de otros enunciados y normativos (fonticos, gramaticales y

lxicos) que aseguran su unidad y comprensin. No hay vnculos naturales sino arbitrarios en las

unidades de la lengua, pero su carcter social la hace normativa e histrica. Entre el sistema y la

historia no hay relacin, son esferas distintas, pero "lo que hace la conciencia y la unidad de la

lengua es su corte sincrnico, se transgrede y se subestima en el corte diacrnico. El presente de

una lengua y la historia de la misma no se comprenden y no son capaces de comprenderse uno a

otra"38Para el subjetivismo la esencia de la lengua se manifiesta en la historia, la lengua no es

repeticin sino renovacin; sistema e historia se comprenden mutuamente (Vossler); mientras que

para el subjetivismo las formas idnticas del sistema son formas muertas y la lengua se manifiesta

en la creacin individual, para el objetivismo la repeticin es la esencia de la lengua.

Los cuatro puntos centrales de la segunda corriente, contrapuestos a los de la primera, son:

1- la lengua como sistema estable e invariable de formas normativas idnticas, previa a la

conciencia individual,

2- las leyes que la componen son lingsticas que expresan la relacin de los signos entre s y son

objetivas para toda conciencia subjetiva,3- las relaciones lingsticas no son ideolgicas (ni artsticas ni cognoscitivas), ni motivadas,

4- no hay relacin entre lengua como sistema e historia (no hay enunciacin, habla).

36Voloshinov, V., El marxismo y la filosofa del lenguaje, Madrid, Alianza, 1992, caps. 1, 2,3 y 4.37En esta investigacin no se trabaj con las posiciones lingsticas de estos autores, se comentanbrevsimamente para dar cuenta del marco de trabajo de Voloshinov.38Voloshinnov, V., p. 86.

16


17/27

Para Saussure la lengua se contrapone al habla como lo social a lo individual, pero en la historia

est la enunciacin, lo individual, regida por leyes diferentes de las del sistema.

En la crtica al objetivismo abstracto plantea en qu medida es real el sistema de la lengua

pensado como formas idnticas? La lengua es un hecho material, real, externo y objetivo,independiente de la conciencia individual, cuando en verdad las normas de la lengua se ven

generadas de manera permanente. Para ellos, el sistema sincrnico no corresponde con algn

momento real del proceso de la generacin histrica.

Todo sistema de normas sociales es un proceso continuo de cambios lingsticos aunque no sea

percibido en ese momento por el individuo, las normas morales, de derecho, estticas son reales

para las conciencias de subjetivas de los miembros de un colectivo dado, la relacin entre la

conciencia subjetiva y la lengua es un factor objetivo inmutable.

"La conciencia subjetiva del hablante no maneja la lengua como un sistema de formas

normativamente idnticas (sino que) la lengua es producto de una reflexin sobre el lenguaje..." 39

sino adecuadas segn el contexto dado segn condiciones concretas de una situacin dada. Al

hablante le importa la forma lingstica como signo siempre mutante y elstico. La tarea de

comprensin del oyente es de comprensin en un contexto dado y concreto de la significacin y la

novedad de un enunciado dado pero no el reconocimiento de su identidad. Voloshinov distingue, al

igual que Benveniste pero de otra manera, comprensin de reconocimiento, los signos son

comprendidos mientras que las seales son reconocidas; la sealizacin y el reconocimiento son

absorbidos por el signo, estn desactivados de la lengua materna, es decir, para la conciencia

lingstica de un miembro de un colectivo lingstico dado. Para hablante y oyente la lengua estrelacionada con el lenguaje en cuanto conjunto de los posibles contextos del uso de una forma

lingstica. La forma de la lengua actualiza su significacin normativa en conflito (criterio de

correccin), especficamente, escrito (uso de reglas, de diccionario).

Adems, la conciencia discursiva de los hablantes no tiene que ver ni con la forma de la lengua ni

con la lengua en s sino en el contexto de enunciaciones determinadas dentro de un contexto

ideolgico dado. "La palabra siempre aparece llena de un contenido y de una significacin

ideolgica o pragmtica." 40Pragmticamente la lengua es inseparable de su contenido ideolgico,

error del objetivismo abstracto.

Todo enunciado es un elemento inseparable de la comunicacin discursiva, que responde a algo y

est orientado hacia algn objeto y representa un eslabn en la cadena discursiva, contina el

trabajo de los anteriores, polemiza con ellos, espera una comprensin activa, est orientado hacia

39Volshinov, V., p. 98.40Voloshinov, V., p. 101.

17


18/27

la recepcin en la esfera ideolgica a la que pertenece. El lingista lo arranca de la esfera real,

estudia la lengua viva como si estuviese muerta, y la lengua materna como extranjera.

Lo que sigue son los postulados de la percepcin de la palabra extranjera del objetivismo abstracto

y su crtica:

1- el momento estable e idntico de la formas lingsticas prevalece sobre suvariabilidad: la comprensin de una lengua no requiere el reconocimiento de elementos idnticos

sino la comprensin de su nueva significacin contextual.

2- lo abstracto prevalece sobre lo concreto: un enunciado monolgico es una abstraccin, la

concretizacin de la palabra de produce en un contexto histrico.

3- la sistematicidad abstracta prevalece sobre la historicidad: ocuparon una posicin

acadmica y conservadora respecto de una lengua viva, como si estuviera acabada debido al

pensamiento sistemtico que no observ la historia (presente como una serie de infracciones

eventuales).

4- las formas de los elementos prevalecen sobre las formas de la totalidad: la lingstica

trabaja sobre enunciados monolgicos aislados, lo exterior al enunciado, para ellos la oracin,

permanece fuera del anlisis. No hay transicin o relacin entre los elementos de un enunciado y

las formas de su totalidad. Un enunciado puede ser percibido y comprendidio sobre el fondo de

otros enunciados totales en la unidad de una esfera ideolgica.

5- la substancializacin del elemento lingstico aislado sustituye la dinmica del

discurso: la forma es un aspecto abstracto de la totalidad dinmica de una actuacin discursiva

completa, es decir, del enunciado.

6- la monosemia y la monoacentualidad sustituyen su polisemia y poliacentualidad: elsentido de una palabra se define por el contexto y vara en virtud de l, pero no pierde su unidad

propia de significacin. Los contextos de uso a veces se contraponen mutuamente como en las

rplicas de un dilogo que obedecen a a contextos multidireccionales. Todo enunciado expresa una

conformidad con algo o una negacin de algo, estn en interaccin y lucha.

7- la lengua es cosa acabada que se transmite de una generacin a otra: la

lengua es un proceso ininterrumpido de generacin, los individuos ingresan a ella, no la reciben.

8- hay incapacidad de comprender la generacin de la lengua desde su interior: el

objetivismo no relaciona la lengua sincrnicamente con el proceso generativo por lo que excluye la

participacin activa de la conciencia hablante en el proceso degeneracin histrica que resulta

mecanicista de la necesidd lingstica.

El objetivismo no puede reconocer la produccin del enunciado como acto individual ni a partir de

condiciones psicolgicas individuales o psico fisiolgicas. "El enunciado tiene carcter sociolgico".41

41Voloshinov, V., p. 117.

18


19/27


20/27

social que mide la vivencia y la expresin, y por las fuerzas sociales hacia las cuales deben

orientarse.

El centro organizador de cada enunciado, de cada expresin no se encuentra adentro, sino afuera:

en el medio social que rodea al individuo."44

La interaccin es la realidad principal del lenguaje, el dilogo es una de las formas ms importantesde la interaccin.

El estudio del lenguaje debe ser realizado a partir:

1- formas y tipos de interaccin discursiva en relacin con sus condiciones concretas, 2- formas de

enunciados concretos, de algunas actuaciones o gneros,

3- la revisin de las formas del lenguaje tomadas en su versin lingstica habitual.

Las conclusiones de Voloshinov son:

1- la lengua como sistema es una abstraccin,

2- el lenguaje es un proceso continuo de generacin en la interaccin,

3- las leyes de la generacin lingstica son sociolgicas,

4- la creacin del lenguaje no coincide con la artstica o con otro tipo de creacin, pero tampoco es

una separacin de los sentidos y valores ideolgicos que contiene,

5- la estructura del enunciado es sociolgica, surge entre los hablantes.

El enunciado posee un tema y un significado. El tema es unitario, individual e irrepetible, y es

concreto como el enunciado. El significado son los aspectos repetibles e idnticos a s mismos en

todas las repeticiones del enunciado. El tema es indivisible y el significadose desintegra en una

serie de significados de los elementos lingsticos que lo conforman (palabra, sintaxis, morfologa,

entonacin).

"El tema es un sistema de signos complejo y dinmico, que trata de adecuarse a un determinado

momento de la generacin. El tema es reaccin de una conciencia en proceso de generacin a la

generacin del ser. La significacin es el aparato tcnico de la realizacin del tema."45No se puede

trazar una frontera mecnica, no hay tema sin significacin ni viceversa. El tema debe apoyarse en

cierta estabilidad del enunciado. La relacin mutua entre ellos es que el tema es el lmite superior y

real de la significacin, quiere decir algo concreto. El significado es el lmite inferior, nada quiere

decir y posee una potencialidad, una posibilidad de significacin en un tema concreto. La diferencia

entre ambos se aclara en la comprensin activa. Comprender un enunciado significa orientarse con

43Voloshinov, V., p.126.44Voloshinov, V., p. 130.45Voloshinov, V., p.139.

20


21/27

respecto a l, en un contexto. Por encima de cada palabra formamos una especie de estratos

formados por nuestras palabras como respuestas. Toda comprensin es dialgica, busca la

contrapalabra. "La significacin es el efecto de interaccin del hablante con el oyente con base en

el material de un comlejo fnico determinado."46

El problema de la interrelacin entre valoracin y significacin es que toda palabra, posee un temay un significado referencial o de contenido y una valoracin, es decir, los contenidos referenciales

se presentan en el discurso vivo. El acento es la entonacin expresiva aunque no est presente en

todos los casos, selecciona y ubica los elementos significantes en el enunciado. Cada enunciado es

una orientacin axiolgica, y el cambio de significacin es una re-valoracin.

5 parte: otros problemas.

A partir de las posiciones expuestas y algunas discutidas se encuentran dos grandes "direcciones"47

que focalizaran el discurso y la lengua preferentemente desde posiciones de sujeto por un lado, o

desde el lenguaje como productor de contexto y la interaccin, por otro lado. En trminos

epistemolgicos, es difcil mencionar el estatuto de la categora de gnero, que si bien "se dice" en

los trabajos procedentes de la etnolingstica y del anlisis conversacional, se presupone que hay

sujetos del gnero en uso del lenguaje y que estn determinados por distintos rdenes culturales e

ideolgicos de los que se da cuenta a travs de las prcticas.

Por otro lado, no hay elementos para rastrear un sujeto del gnero en la otra corriente, a menos

que se fuercen las categoras para sealar que est presente, de manera oculta, y que lucha por

manifestarse. El sujeto sigue siendo un resto que surge de la caracterizacin de lenguajes

universales. Analizar las formas sin saber qu se est analizando es un camino derrotado deantemano.48

Cabe preguntarse sobre cules debern ser las condiciones que debe reunir una nocin de sujeto

pertinente para el estudio discursivo sobre las diferencias de gnero y sobre cules debern ser los

mtodos creados para dar cuenta de ellas. Est demostrado que de toda posicin sobre el lenguaje

se podr establecer una posicin de sujeto; dicho sujeto debe ser estudiado a partir de las

condiciones de produccin simblicas de la cultura, y por ende, de la ideologa, porque ese es el

46

Voloshinov, V., p. 142.47Se utiliza este trmino para hacer generalizar sobre los dos grandes recorridos, el de carcter europeofrancs y el de carcter ruso americano, ambos con extensiones que se encuentran en todo occidente, porejemplo, la Lingstica Sistmica Funcional es de gran desarrollo particularmente en Australia, sin desmerecerel trabajo britnico, y desde hace poco tiempo hay lingistas sistmicos que estn investigando en nuestropas, como as tambin es muy importante el desarrollo de los estudios de la pragmtica del habla y de laetnolingstica en nuestro pas, a cargo de la Dra. Luca Golluscio. Tambin comienzan a desarrollarseintensamente los estudios lingsticos y de discurso sobre conversacin.48Se ha averiguado que en el lenguaje de seas de los sordos existe, y se est perdiendo, una forma para ellenguaje femenino (seas a nivel del rostro) y un lenguaje masculino (ms corporal) que las mujeres, alcasarse, pierden.

21


22/27

lugar de su emergencia discursiva como sujeto de la diferencia sexual. La descentralizacin del

sujeto universal y masculino permitir subvertir las dicotomas fomentadas desde el estructuralismo

a travs de una nocin de lenguaje y de discurso propiciado desde el contexto de la diferencia.

Patrizia Violi49 es fuertemente crtica de las posiciones de las corrientes interaccionistas que

abordan el lenguaje del gnero. Entre otras cosas seala justamente que el anlisis del lenguaje delgnero se ha transladado del campo del discurso y de la lengua al campo social, se plantea en

trminos de minoras lingsticas, o de diferencias tnicas o sociales. "La relacin de la mujer en el

lenguaje es intrnsicamente contradictoria, porque el lenguaje la empuja a emplear un sistema de

representacin y expresin que la excluye y la mortifica. Sin embargo, esta relacin contradictoria

puede revelar algo ms que un valor negativo en caso de que se cuestione desde un punto de vista

diferente. Pero para poder efectuar esta separacin se hace necesaria una reflexin sobre el sujeto

y sobre la relacin que se constituye entre sujeto y lenguaje. Si toda teora presupone, de forma

ms o menos explcita, una teora del sujeto, el problema central es el de hacer explcitas las

formas all donde stas no se presentan de forma manifiesta."50

Conclusiones

El recorrido que se realiz comenz por revisar las ideas sobre el lenguaje como un sistema

inmanente y cerrado, autosuficiente que dejaba fuera de s toda presencia del sujeto.

Decididamente, era necesaria una primera posicin semitica con pretensin cientfica para

comenzar a teorizar otras, hoy tan alejadas de De Saussure.

Es evidente que hay zonas oscuras o silentes en las teoras de los diferentes discursos (lingsticos,

cinematogrficos, sociolingsticos) pero que comenzaron a dilucidarse o a esclarecerse, tambin

en los campos filosficos, antropolgicos o psicoanalticos. Si bien el anlisis del discurso no provee

un mtodo o variables para el estudio del gnero comienza formularse la falta de aportes vlidos y

significativos.

Tambin es evidente que el hecho de haber asignado una subjetividad a la lengua a partir de los

parmetros masculinos, no se tolera una subjetividad de la diferencia. Este problema se profundiza,

considerndolo desde una mirada actual, a partir de la nocin de lengua como estructura de De

Saussure, modelo que es retomado por Lvi-Strauss para su nocin de estructura de la cultura, en

la que los sujetos que intercambian objetos son hombres que intercambian mujeres y nunca es unarelacin equitativa o diferencial, es solamente el sujeto masculino el que se est conceptualizando y

siempre se trata de un objeto mujer el que se est intercambiando.

La tarea realizada se interesa por una posicin discursiva-lingstica, especficamente por la

dimensin enunciativa, que de cuenta de las diferencias de gnero.

49Patrizia Violi, El infinito singular, Madrid, Ctedra, 1991, caps. 3 y 5.

22


23/27

La problemtica en torno a la referencia del discurso a partir de la instancia del sujeto, en primer

trmino, alude a la emergencia del sujeto a partir de la enunciacin: la deixis y la modalidad

permiten caracterizar al propio sujeto que enuncia, su relacin con otros sujetos y con el objeto

enunciado, pero deja de lado las diferencias culturales en cuanto al gnero debido a su

representacin universalista.Ms adelante, el sujeto se asienta sobre elementos lgicos, racionales y universales provenientes

de la fenomenologa y recin ahora el giro semitico apunta a considerar un modelo de sujeto

atravesado por la pasin, por las emociones, que se manifiesta en el discurso y que puede ser

abordado por una perspectiva enunciativa, semitica pero neutral. Son prematuras las

metodologas para abordar y encontrar un tipo de sujeto del gnero desde estas perspectiva,

aunque se sabe que habr, bajo cualquier metodologa, un excedente de significacin y una

imposibilidad de encuentro pleno con el sujeto sexuado. Pero, el sujeto, lejos de ser una instancia y

una posibilidad de reconstruccin ilusorias, comienza a ser planteado desde las teoras del gnero.

Habr que manifestarlo en los contenidos tericos, conceptualizarlo, pero su existencia es evidente.

El advenimiento del sujeto procede de las operaciones culturales, ideolgicas, inconscientes, es

decir, simblicas, que constituyen al hombre en sujeto que se manifiesta en la lengua. Si la cultura

es el lugar en donde lo ideolgico se manifiesta ms eficazmente a travs del lenguaje y las

prcticas discursivas variadas -entre otras instituciones- 51, ser ese sujeto fragmentado, alienado,

hablado, convocado por el lenguaje el que habr que conceptualizar como instancia de gnero en

el discurso, donde habr que buscar las diferencias entre sujetos masculinos, femeninos, es decir,

de diferentes identidades.

El sujeto del gnero es un sujeto diferente y heterogneo. Tambin sabemos que hay un discursosexuado, es decir, marcado por las instancias sexuadas de la enunciacin, por lo que tiene

instancias de gnero en lo que respecta a la formacin del lenguaje. Las caractersticas de este

sujeto se manifiestan en el enunciado y en la enunciacin, pero no se han encontrado teoras o

conceptualizaciones semiticas en lo que respecta al sujeto de la diferencia. El sujeto que engendr

la semitica es un sujeto neutro equivalente al sujeto universal, esto es, masculino. Cuando Lvi

Strauss, desde el seno del estructuralismo saussuriano, tuvo que definir a la mujer, lo hizo en

trminos de objeto de intercambio entre los sujetos masculinos. Para el psicoanlisis freudiano la

mujer estuvo vista en trminos de objeto tambin, relegada al deseo del hombre, objeto de

circulacin entre hombres, castrada y masoquista.

As como no se encontr un soporte conceptual o terico que demuestre o conceptualice en el

plano de la lengua ni en el del discurso marcas de la diferencia, s se han encontrado materiales

50Patricia Violi, op. cit., p. 100.

23


24/27

diversos y mltiples con relacin a los estudios literarios y crtica literaria, pero exceden los lmites

de este trabajo.

Otros trabajos, de procedencias diferentes pero para atender en los aspectos tericos y

metodolgicos, llaman la atencin en algunos sentidos con respecto al gnero y a la ideologa. El

estudio sobre gnero y lenguaje es un campo interdisciplinario formado por especialistasprocedentes de la antropologa, la educacin, la sociologa, la psicologa, la comunicacin

lingstica, la literatura, los estudios de mujeres y, en grado menor, los lingistas.

Otros estudios de inters son los que se conoce como lingstica crtica y estilstica feminista. La

estilstica trabaja sobre la teora literaria y sobre la lingstica con la finalidad de producir anlisis de

los textos a partir de modelos lingsticos. Se apoya en los presupuestos procedentes de las teoras

de Chomsky, de Searle y de Halliday, entre otros autores. La revista Feminaria52tradujo y public

la introduccin del libro Feminist Stylisticde Sara Mills (Londres, 1995). En esta introduccin Sara

Mills explica que tanto la palabra "estilstica" como la palabra "feminista" son trminos de alta

complejidad pero que resumen su inters por ejercer una descripcin y tambin un anlisis de los

textos no literarios de manera de estudiar cmo se representan los significados de gnero en la

cultura. Coincide en sealar que la mayora de los anlisis de gnero trabajan especialmente en

anlisis de contenido y no proveen estrategias, en el sentido de herramientas, para estudiar las

representaciones de las diferencias de gnero en los textos.

Los autores procedentes de la sociolingstica, trabajan con tres proposiciones sobre el modo de

funcionamiento del lenguaje, la primera es que el lenguaje en uso encarna enfoques especficos de

la realidad, es decir, la estructura del lenguaje determina la mirada sobre el mundo; la segunda es

que el discurso est determinado por factores sociales y polticos y sus variaciones "expresanactivamente las diferencias sociales estructuradas que las provocan"53; la tercera por ltimo, es que

el uso del lenguaje es parte del proceso social, por lo que constituye significaciones y prcticas

sociales en contextos interpersonales y sociales efectivos. El lenguaje, para este grupo, es un

mediador de las relaciones interpersonales y una fuerza de perpetuacin de las relaciones sociales

subyacentes. Las conexiones entre la estructura lingstica y la estructura social son fuertes y

omnipresentes, "... los agrupamientos y las relaciones sociales influyen en el comportamiento

lingstico (...), esas pautas socialmente determinadas del lenguaje influyen en el comportamiento

no lingstico, incluyendo, de manera decisiva, la actividad cognitiva. La sintaxis puede codificar

una visin del mundo sin ninguna eleccin consciente por parte de un escritor o hablante.

Alegamos que la visin del mundo les viene a los usuarios del lenguaje de su relacin con las

51Para Edmund Cross el sujeto cultural slo se expresa en el plano del enunciado, mientras que el sujeto deldeseo (del inconsciente) se expresa en la enunciacin. Cross, E., El sujeto cultural. Sociocrtica y psicoanlisis,Bs. As., Corregidor, 1997.52Feminaria, Ao XIII, N 24/25, noviembre de 2000.53Fowler, R. y otros, Lenguaje y control, Mxico, F.D.C.E., 1983, prlogo.

24


25/27

instituciones y de la estructura socioeconmica de su sociedad... De manera similar, la ideologa

est lingsticamente mediatizada..."54

A partir de la lectura de Valentn Voloshinov queda establecida la necesidad de estudiar el lenguaje

en accin, es decir, para l el significado es social y se realiza en la interaccin verbal, el tema del

enunciado surge de una emisin en contexto, es nico, y el significado es invariable a travs de loscontextos. La evaluacin es el vnculo entre una expresin lingstica dada y el horizonte ideolgico

de categoras, valores y orientaciones que los hablantes traen a la interaccin. Los signos son

multiacentuados, es decir, se significan y vuelven a significar en la interaccin. La posicin sobre el

lenguaje que aporta Voloshinov podr establecer un marco para la posicin de sujeto de gnero a

partir de las condiciones de produccin simblicas de la cultura, de la ideologa, porque ese es el

lugar de su emergencia discursiva como sujeto de la diferencia sexual.

Para cerrar, se van a tomar algunas conclusiones a las que llega Patrizia Violi en El infinito singular

debido a que es la autora con la que ms se han dado similitudes en este abordaje y en otros sobre

la posicin del sujeto:

el sujeto que las teoras postulan es trascendental y universal, fuera de toda instancia

diferenciadora

cuando se abre esa unidad trascendental, se vuelve a lo indiferenciado, la nica variable es

la simplificacin sociolingstica

la subjetividad femenina no parece tener lugar para manifestarse y configurarse sino

empricamente, nunca como singular especfico

el yo del lenguaje se define por contraposicin a la naturaleza, la mujer es lo negativo y lo

biolgico.

54Fowlwe, R. y otros, Lenguaje y control, Mxico, F.D.C.E., 1983, pg. 247.

25


26/27

Bibliografa

Alcoff, L., "Feminismo cultural versus posestructuralismo: la crisis de identidad en la teora

feminista", en Un nuevo saber. Los estudios de mujeres, editado por Marysa Navarro y Catharine R.

Stimpson, Tomo IV: Nuevas direcciones, Bs. As., FCE, 2001.

Beaugrande, R. de, "La saga del anlisis del discurso" en El discurso como estructura y proceso,

Van Dijk comp., Bs. As., Gedisa, 2000.

Benveniste, E., "Semiologa de la lengua" en Problemas de ligstica general, Mxico, S.XXI, 1985,

tomo 2.

Bernhardt, F., "El lugar de la mujer" en Revista Cientfica, U.C.E.S., Dpto de investigaciones,

Volumen VII, N 1, Otoo 2003.

Butler, J., "Sujetos de sexo/gnero/deseo" en Revista Feminaria, X, 19, junio de 1997.

Ciamberlani, L y Zerrillo, S., "Las lecturas de la semitica en torno a la cultura y la comunicacin",

Documento de ctedra de Semitica de los medios II, Bs. As., Fac. de Ciencias Sociales, U.B.A.,1989.

Cowie, E. (1997) Cinema and Psychoanalysis, University of Minnesota Press.

Cross, E., "El sujeto cultural", Sociocrtica y psicoanlisis, Bs. As., Corregidor, 1997.

de Lauretis, T.Alicia ya no, Madrid, Ctedra.

De Saussure, F, Curso de lingstica general; Bs. As, Losada, 1984.

Doanne, M. A. (1987) The desire to desire, Indiana University Press.

Duranti, A.,Antropologa lingstica, Cambrigde, Cambrigde University Press, 2000.

Duranti, A., "La etnografa del habla: hacia una lingstica de la praxis" en Panorama de la

Lingstica Moderna de la Universidad de Cambrigde, Vol. IV:El lenguaje: contexto socio-cultural,

Madrid, Visor, 1992.

F. Rcanati, La transparencia y la enunciacin, Bs. As., Hachette, 1981.

Feminaria, Ao XIII, N 24/25, noviembre de 2000.

Filinich, M. I., Enunciacin, Bs. As., Eudeba, 1998.

Fontanille, J., "El giro modal en Semitica" en Morph 9/10, Puebla, Universidad Autnoma de

Puebla, 1994.

Foucault, M. (1970) El orden del discurso, Bs. As., Tusquets, 1992 (4 ed.)

Fowler, R., Hogde, B., Kress, G., Trew, T., Lenguaje y control, Mxico, F.D.C.E., 1983.Geragthy, G. (1998) "Feminismo y consumo meditico" en Curran, J., Morley, D. y Walkerdine, V.

Estudios culturales y comunicacin. Anlisis, produccin y consumo cultural de las polticas de

identidad y el posmodernismo, Barcelona, Paids.

Greimas, A. J., La enunciacin, una postura epistemolgica, Puebla, Universidad Autnoma de

Puebla, Cuadernos de Trabajo 21, 1996.

26


27/27

Greimas, A. J., La enunciacin, una postura epistemolgica, Puebla, Universidad Autnoma de

Puebla, Cuadernos de Trabajo 21, 1996.

Kaplan, A. (1983) Las mujeres y el cine, Madrid, Ctedra.

Metz, C. (1979) "El significante imaginario" y "El film de ficcin y su espectador" en Psicoanlisis y

cine, Barcelona, Gustavo Gili.Mills, S., "Estilstica Feminista", en Feminaria, Ao XIII, N 24/25, noviembre 2000.

Mulvey, L. (1988) Placer visual y cine narrativo, Valencia, Centro de Semitica y teora del

espectculo.

Navarro, M. y Stimpson, C., Un nuevo saber. Los estudios de mujeres, Bs. As., F.C.E., 1998, 1999,

2000, 2001.

Parret, H., "Decir las propias pasiones" en De la semitica a la esttica. Enunciacin, sensacin,

pasiones, Edicial, Bs. As., 1995.

Parret, H., La enunciacin y su puesta en discurso, Cruzeiro Semitico n 6, 1987, mimeo.

Rcanati, F., La transparencia y la enunciacin, Bs. As., Hachette, 1981.

Rodrguez Magda, T., Foucault y la genealoga de los sexos, Barcelona, coedicin de Anthropos

Editorial de Barcelona y Universidad Autnoma Metropolitana de Mxico, 1999.

Silverstein, M., "Shifters, Categoras Lingsticas y Descripcin Cultural", en Estudios sobre el

contexto Icompilacin de la ctedra de Etnolingstica de la Dra Golluscio, Bs. As., OPFyL., U.B.A.

(s/r).

Tannen, D., Gnero y discurso, Barcelona, Paids, 1996.

Violi, P., "Sujeto lingstico y sujeto femenino", en Feminismo y teora del discurso, Giulia Colaizzi

ed., Madrid, Ctedra, 1990.Violi, P., El infinito singular, Madrid, Ctedra, 1991.

Voloshinov, V., El marxismo y la filosofa del lenguaje, Madrid, Alianza, 1992.

Bernhardt, Florencia M.E. (2004) - Género y discurso.pdf

Documents

Transcript of Bernhardt, Florencia M.E. (2004) - Género y discurso.pdf