QUICK MAGAZINE 4

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Quick m a g a z i n e4

DIRECTOR

Cuitláhuac Utrera Gonzá[email protected]

DISEÑO

Ramón Corona Mací[email protected]

comercializaCIÓN

Marco Antonio [email protected]

EDICIÓN

Byelulu MEDIA®

[email protected]

CORRECCIÓN DE ESTILO

Belina Castañ[email protected]

ADMINISTRAción

César Mesino [email protected]

www.byelulu.comGladiolas 15, Mz. 15 lote 9 Dpto. 5 Sm. 22

Cancún, Quintana Roo. México.

Tel. 273 22 94

Quick magazine. Revista mensual editada y distribuida

por la agencia Byelulu MEDIA®


ÍndiceRetro-Futuro En Auto por los ochentas

El diario de ella Los “mensajes” ocultos del Rock

Discomentario Rigo es amor

Generación XÉrase una vez...

Sector BetabelDe Canicas, Trompo y Carreterita New Classics Billy Joel Soundtrack Amor Eterno Déjà vuCantinflas Show

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Hola qué tal ¿cómo están? Mi nombre es Cuitláhuac, pero todos mis amigos me llaman Quick, y te agradezco enormidades que nos leas en Quick Magazine.

Cuando decidimos que uno de nuestros lectores fuera la portada del mes de abril no concebíamos aún el impacto de nuestra revista en cada uno de ustedes; es curioso cómo cada uno de nosotros, los que trabajamos en la revista, nos identificamos con cada una de las fotos que nos hicieron favor de enviar; todos tenemos fotos similares y en automático recordamos a nuestros amigos, sus apodos, las aventuras y mil detalles que nos tocó vivir.

Eso es el soundtrack de nuestra vida, eso es Quick Magazine; el soundtrack de toda una generación de la cual somos parte, de la que tú y nosotros somos parte.

Cuando iniciamos con este proyecto alguien nos dijo que fracasaríamos porque los temas se terminarían rápido pero ¿cómo pueden los recuerdos ser pocos? ¿de cuántas cosas te puedes acordar al ver una sola foto, incluso cuando no es tuya o de personas que conozcas?

Hoy en día existen mil páginas en la web que hablan de todos estos temas ochenteros pero, seguimos comparando lo que fue de lo que es, los que éramos con los que ahora son, los que no estaban con los que ahora están pero nosotros en Quick Magazine vamos más allá de todo esto; Quick Magazine no lo ve como historia pasada.

Quick Magazine no busca que “recuerdes” o “compares” cosas, Quick Magazine quiere que te emociones, que vivas, que te rías, que llores, que valores lo que tuviste, lo que fuiste, lo que sentiste; Quick Magazine quiere que al mirar al pasado veas lo maravilloso que es el presente, nuestro presente.ed

ito

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Quick Magazine es el reflejo de lo que hoy somos, lo que en un momento se denominó como “la generación X”; aquellos que nacimos entre mediados de los 60’s y no más allá de 1981. Los que vivimos miles de transiciones, de la TV en blanco y negro a la de color, del mesa pong y Atari a los Nintendos y Xbox; de querer estar en la calle todo el día para jugar canicas, trompo, yo-yo, hoyos y mil cosas más o a no querer salir para nada a la calle por jugar en la TV videojuegos; nosotros nos sabíamos el número telefónico de todos los amigos, del trabajo de nuestros papás, incluso el de la escuela y ahora si cada persona recuerda 10 son muchos; en fin, somos esa generación.

¿Qué nos queda? Que no dejes de sentir la alegría de haber vivido lo que viviste, porque ello nos augura a todos un mejor futuro; disfrútala y continúa compartiéndola con nosotros porque nos das alegría a nosotros y a muchos. Regálanos tu emoción, escribe cómo fue tu primer beso y qué sentiste; tu primer novio y cómo lo bateaste; qué cara pusiste al ver primera bicicleta que te compraron; tu mejor travesura; cuéntanos lo que tú quieras porque Quick Magazine eres tú también. Mándanos una o mil fotos y platícanos la historia detrás de ella; mándala a nuestra redacción, sé parte de nosotros y permite que Quick Magazine siga siendo el soundtrack de tu vida.



En auto por los Ochentas

¿El auto de mayor lujo?

Cierto, y aunque en Estados Unidos eso les causaba una risa loca, durante esa época ochentera el coche más caro que el dinero podía comprar en México eran los LTD que se transformaron en Crown Victoria más adelante.

Un amigo tenía uno (más bien su papá) al que cariñosamente llamábamos “la sala” por su tamaño. Por ser el único coche de estas características se transformó en el símbolo de estatus; sin embargo también fue una especie de “pantalla” ya que no era un coche extremadamente caro (según los estándares internacionales) por lo que no era requisito ser el más rico del pueblo para comprarlo. La diferenciación entre los “ricos” y los “verdaderamente ricos” se dio cuando comenzaron a importarse autos y los primeros siguieron comprado “nacionales” mientras los segundos cambiaron a “internacionales”.

Otra de las razones del éxito de la marca es que por alguna extraña razón la generación anterior desarrolló una mística a su alrededor: Y muchos lo decían con un aire iluminado y con los ojos entrecerrados tratando de ostentar una sapiencia infinita cuando hablaban de estos armatostes que en realidad eran similares a todos los demás.

Contrario a lo que ocurre en la actualidad tan solo existían siete marcas. Cada una de ellas tenía unos cuantos modelos por lo que la variedad era muy limitada y en muchos casos casi nula.

La razón principal es que a alguien del gobierno se le ocurrió la brillante idea de que, para vender un auto en México, éste debería de ser fabricado en su mayor parte en el país, por esa razón, además de lo pequeño que era nuestro mercado, la variedad era mínima por lo que la mayoría de los que vivimos la infancia y la adolescencia en esos tiempos creamos una serie de fetiches automovilísticos que aún perduran. He aquí algunos:

RE

TR

O-F

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Por: Profesor Galleta


El único deportivo de México

Mientras que en Estados Unidos siempre se le ha considerado como un coche “juvenil”, en México, en los ochentas, adquirió un estatus casi místico. Era el único deportivo que se podía ver en la calle y por ahí de principios de los ochentas sufrió un auge que, en esos entonces, parecía se la encarnación del ideal automotriz.

Algunos envidiosos le decían “el caracol” por aquello de que siempre tenía “un baboso” adentro sin embargo el auto fue el que tenía mejor rendimiento femenino (mayor número de mujeres “conquistadas” por kilómetro). Era un sueño absoluto y solamente los más afortunados podían tenerlo; insisto en que en aquella época no había autos europeos. ¡Este era el rey absoluto!

Caribe; el económico que quiso ser deportivo.

Se introdujo en México el modelo Golf por ahí de finales de los setentas. “Caribe, una bella pieza de ingeniería” rezaba el eslogan.

Se transformó en el auto más deseado de la época para los adolescentes que, repito lo de la escasa variedad del mercado, lo veíamos como si fuera un automóvil deportivo cuando en realidad estaba más cercano a prototipo que a los coches verdaderos. Estoy seguro que el éxito de los ahora “exclusivos” y absurdamente

caros coches de la firma alemana es que los que ahora “pueden” comprar estos coches alguna vez soñáron con subirse a esas patinetas ochenteras.

Un Caribe con cajuela.

Esa es la verdadera historia del Jetta. A los ingenieros se les ocurrió un diseño mas “cajueludo” y de pronto tuvieron un éxito mercadológico en las manos que ya ha perdurado.

Podríamos atribuirle las mismas razones de éxito que a su hermano menor; surgido en una época en que la principal competencia eran los Datsun 510, clásico coche de señora (o de taxi) y los Renault 12 que tenían poco encanto.


Pienso en él y me invade una emoción que recorre todo mi cuerpo y luego esas “mariposas” que se estacionan en mi panza; me la paso riendo y no sé ni de qué, estoy del mejor humor y todo el mundo me dice que me veo feliz y muy guapa. ¿A poco no? Todos tus pensamientos están enfocados en él, caminas en las nubes y el mundo es un lugar maravilloso por el simple hecho de que él existe. Esa es la feniletilamina, mejor conocida como FEA, que te hace estar como drogada; en un high similar al de la cocaína o las anfetaminas (por eso se te quita el hambre y no puedes ni dormir).

Estás esperando su llamada, su mensaje, su mail, un comentario en el Facebook, ya que lo aprendí a usar, ¡algo caray! Lo que sea, pero… No pasa nada, cero contacto.

Claro ¡No importa! Porque tú eres una mujer segura de sí misma, con una vida llena de actividades y responsabilidades, así que esto no te puede amargar la vida ni se puede apoderar de ti. Además, seguro está ocupado y en cualquier momento aparece…. Bueno, ¿sabes qué? ¡¡¡SOY UNA MUJER MODERNA!!! “Yo le voy a dar señales de vida, seguro le alegro el día…”, te dices a ti misma y le mandas un mensaje, pero no hay respuesta... Él abre el correo y lo ataca la testosterona preguntándose: “¿Qué parte de estoy ocu-pa-do, tra-ba-jan-do es la que no entendió?”

“No hay bronca, al rato aparece, tiene cosas qué hacer”, te dice tu amiga a la que traes asoleada con el tema del galán inalcanzable. Esta es la FEA (la hormona,

no la amiga) bajando, por eso como que ya no te sientes tan bien… Y llega la VASOPRESINA.

Tratas de seguir con tu día, sacar adelante los pendientes de la chamba, la casa, o cualquiera que sea el caso, pero no puedes, tu mente está llena de él y no hay espacio para pensar en ninguna otra cosa… Tu teléfono empieza a sonar y hasta tus amigas te caen mal por llamar cuando estás esperando SU llamada. Ya la sonrisa desapareció de tu cara y las mismas personas que en la mañana te dijeron que te veías muy bonita te dicen que te ves como enferma, que si te sientes mal de la panza.

Te empiezas a enojar y a preguntarte ¿qué se siente el infeliz ese para tenerte así? Después de todo nadie puede estar

El Diario de ellaFlorencia Deffis http://infidelidadfemenina.com/blog


Hoy no es un día como cualquiera, hoy… Ah… Mmmm… En mi mente existe alguien ¡por fin! Después de dos años y medio,

y finalmente me siento viva, renovada, como si tuviera 20.


vida NO GIRA ALREDEDOR TUYO ¡¡¡No aparece!!! Qué poca madre que te tenga así ¿Cómo se atreve? ¿Por qué lo hace? Seguro lo planeó… Claro, lo hace a propósito para que te claves y no dejes de esperar su llamada y estar pensando en él. Pero ¿sabes qué? Tú que eres la mujer moderna e independiente que eres, no vas a caer en ese juego (¡Já! Eso dices tú) “Cuando me hable no le voy a contestar al muy cabrón, a ver quién puede más”.

Tu pobre amiga, por tu culpa, tampoco ha podido hacer nada en todo el día porque le has hablado 8 veces preguntándole lo mismo: ¿LLAMARÁ? El dúo dinámico VASOPRESINA-ADRENALINA se volvió a apoderar de ti…

Por fin llama y dices: “Ok, le voy a contestar pero sólo para ver la cara que

pone cuando lo mande a freír espárragos, que sepa muy bien que conmigo no se juega”, HELLO ADRENALINA-DOPAMINA. Contestas y como si fuera tu dueño, sin preguntar, te dice que pasa por ti a las 8:00 pm porque tiene muchas ganas de verte. Con eso te derrite (FEA, maldita seas, con razón te llamas así, más bien te deberías de llamar pinche). La voz te tiembla y se te olvida que llevas las 10 horas pasadas en un verdadero infierno pasando del amor al odio. Así que aceptas, te pones tu mejor outfit (mismo que tienes listo desde ayer), el que te hace ver flaca, pero con pompa, pero alta, pero con cintura. Te peinas, perfumas y maquillas para estar lista cuando llegue el Príncipe Azul.

En punto de las 8:00 ya estás más que lista, pero te vuelves a mirar al espejo por unas 40 últimas veces para ver si

TAAAAAAN ocupado; qué descortesía que no te conteste… Sientes la cara caliente y el estómago revuelto, pero ya no por mariposas, ahora es por coraje ¿¿¿Cómo es posible que hayan pasado ya 4 horas y nada??? Ésta es la VASOPRESINA que te baja de las nubes; este NEUROPÉPTIDO es el que nos hace pensar con mayor claridad e incrementa nuestro estado de alerta, permitiendo un golpe de adrenalina, que hace que te molestes.

Bueno, seguro le vuelves a llamar a tu amiga, vas al baño, te echas agua fría en la cara y cuando ya te medio calmaste ¡¡APARECE!! Te manda un mail. Tú cuando ves su nombre en tu bandeja de entrada sientes como se te puede salir el corazón y hasta se te cae “el estúpido e inútil mouse” de lo rápido que quisiste hacer click sobre su correo. Abres el mail –gracias a la VASOPRESINA, que le bajó la TESTOSTERONA–, que decidió contestarte porque, después de todo, eres buena onda y como que sí te quiere. El mail no contiene más de 6 palabras y una despedida cálido-ojeta como: “besos, nos hablamos al rato”, y tu mente te pregunta: ¿¿¿CUÁL RATO??? ¿Cuánto falta? ¿Será hoy, mañana, en esta semana? ¿Cuándo? Total, piensas tú, mejor me calmo; ya apareció, ya dio señales de vida y “al rato” (whatever that means), va a hablar –y bueno, te mandó besos y eso hace que tu corazón lata a una velocidad peligrosa y le devuelve la sonrisa inexplicable a tu cara–. ¡¡¡GRACIAS OXITOCINA!!! Te imaginaste esos besos que te mandó y esas manos que tanto te gustan y ¡¡¡Bum!!! La OXITOCINA entró en acción y por eso vuelves a estar contenta…

A la media hora ya estás nerviosona, preguntándote si “el rato” ya habrá pasado o si tiene que ser una hora completa para que “el rato” sea legal y no te veas ni desesperada, ni urgida, ni rogona, ni arrastrada… A la hora sigues viendo el reloj y el muy infeliz, desgraciado, cuya

todo está como debe ser y sí, todo está en orden y te ves como reina.

A partir de las 8 con uno y hasta las 8:15 (hora en que aún no llega el muy cabrón, cómo se atreve a tener una vida que NO gira alrededor de ti y a no calcular el tráfico); te pasan los siguientes pensamientos por la cabeza:¿Y si no llega?¿Y si me planta?¿Le marco para ver dónde anda?¿Servirá mi phone? A ver, lo voy a checar… Sí, sí sirve, no a ver pérate, “Amigui, me puedes marcar a mi cel, creo que no está funcionando…”. Lolis, la amiga amable, te marca y sí funciona “tu phone”.¿Le habrá llamado su ex y se fue con ella?¿Estará en la chamba o más bien anda en alguna comida y ya le dio hueva venir?

¿Le habrá pasado algo? ¡¡¡Qué tal que chocó, qué tal que lo asaltaron!!!¿Se me verá bien este lipstick? A ver… Creo que se ve muy zorro, mejor me pongo este…

¡¡¡¡Por fin llega!!!! Toca la puerta, abres y te preguntas ¿Por qué es taaaaaaan guapo? (FEA) Te acercas a saludarlo y huele a tu loción preferida y para ese momento ya como que ves nublado (FEA + Oxitocina = ya te perdimos), y en el momento que te abraza y te dice que tuvo un día horrible y se moría de ganas de verte, ya no puedes pensar más, estás en el paraíso, lo besas y el mundo vuelve a ser el lugar maravilloso y de ensueño que era a las 9:00 am. Cuando recién estabas esperando su llamada, sólo que ahora mejor porque estás en sus brazos y además… ¡TE QUEDASTE DORMIDA!, SON LAS 10 PM, VES TU CELULAR Y HAY UN MENSAJE DE ÉL QUE DICE: “NENA, NO PODRÉ IR, ESTOY MUY CANSADO”.

¡¡¡¡¡¡CABROOOOOOOOOOÓN!!!!!


Ya la sonrisa desapareció de tu cara y las mismas personas que en la mañana te dijeron que te veías muy bonita te dicen que te ves como enferma, que si te sientes mal de la panza.

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Rigoberto Tovar García

(29 de marzo de 1946 † 27 de marzo de 2005), mejor conocido como Rigo Tovar, fue un cantante y músico mexicano nacido en Matamoros, Tamaulipas. Creó una mezcla musical entre la cumbia, la balada y el bolero con elementos de rock.

Muere el 27 de marzo de 2005 a causa de un paro cardiorrespiratorio.

Es considerado el padre de la música grupera y tropical, un pionero que introdujo instrumentos modernos a la música tropical y la cumbia (guitarras eléctricas, sintetizadores, bajo eléctrico, efectos de sampleo, órganos moog y batería eléctrica, junto a los instrumentos acústicos regionales, además de hacer combinaciones con guitarras españolas y derivados folklóricos y cuerdas clásicas variadas).

Lo verdaderamente característico de la música de Rigo Tovar es que logró hacer de la música popular un producto moderno, sin dejar de basarse en sus formas rítmicas y melódicas musicales. Todo esto tomando los instrumentos que el momento le ofrecía para darle ese toque que hoy en día es un referente dentro de la historia de la música.

Uno de tantos trabajos que tuvo en su vida fue el de mesero y barman, siendo en ese entonces que se le ocurre formar un trío para amenizar a los asistentes y formar el “Trío Recuerdo”, el cual fue teniendo mucho éxito conforme pasaba el tiempo debido a la calidad musical de sus interpretaciones y al carisma de Rigo.

Debido a este éxito, Rigo y sus hermanos Silvano y Marco, invitan a Roberto Vázquez y otros amigos a formar un conjunto tropical denominado “Conjunto Costa Azul”, en honor al gusto de Rigo por ésta rivera francesa.

Fue entonces cuando un ejecutivo de la disquera Novavox (Gapoca), Gaston Ponce Castellanos, lo contrata para grabar su primer disco en 1971, cuya edición en 1972 marca el nacimiento de lo que ahora conocemos como movimiento grupero.

A causa de sus múltiples giras y la transmisión de sus canciones por la radio en México y los Estados Unidos, fue que rápidamente se convirtió en todo un fenómeno comercial, llegando a vender más de 30 millones de copias. En la cumbre de su fama Rigo fue conocido como El Ídolo de México y El Ídolo de las multitudes.

Con la venta de su álbum Amor y Cumbia (1976), se convierte en superestrella en Estados Unidos, México y Centroamérica, llegándose a conocer incluso en Sudamérica también. Tanta era su fama que sus admiradores empezaron a usar la frase “Rigo es Amor”.

Los géneros musicales en los que incursionó van desde los boleros, cumbias, baladas, bolero ranchero, heavy metal, cha cha chá, porro, norteñas, música Texana, chicanas, hustle, villancicos, canciones infantiles, poemas, rock and Roll y hasta música clásica con orquesta sinfónica, siempre con ventas millonarias de cada uno de sus discos...

En 1979 Rigo rompió un record de asistencia de público para un sólo artista en Monterrey, Nuevo León, cuando en las márgenes del Río Santa Catarina reunió a más de 400,000 personas. Los periódicos El Norte y El Sol de Monterrey declararon “Rigo Tovar llenó más que el Papa”. El Papa Juan Pablo II visitó el mismo local reuniendo a 300,000. Dicho Récord no se ha superado, ya que ni artistas de la talla de Luis Miguel, Alejandro Fernández o Shakira, entre otros, han logrado reunir tal cantidad de asistencia en un sólo concierto y con la presentación de un sólo artista.

En internet puedes encontrar algunos videos del gran Rigo y su Costa Azul, mientras interpreta alguno de sus éxitos con su inconfundible saltito “pa’trás” que tanto agradaba a sus fans.


Por: Cesar Peraza


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¡Ya entramos al famosísimo mes de Abril, mejor conocido por ser el mes del chamaco!, ese pequeño humano chistoso y divertido que fuimos alguna vez, que no tenía ninguna otra preocupación más que jugar con trompos, yoyos, a las escondidillas; que con singular alegría comía dulces sin temor a engordar y que seguro, más de una vez, soñó con lo que quería ser de grande. Bien dicen que recordar es volver a vivir…así que por qué no volvemos al pasado y recordamos esos inigualables tiempos…¿Recuerdas cuando jugabas a ser futbolista, policía, piloto, súper héroe, doctor, bombero (en el caso de los niños); y de las niñas ¡bueno! Qué podemos decir, pasábamos de ser veterinarias a maestras, aeromozas, cajeras, princesas, bailarinas, y seguro de ballet… “n” cantidad de profesiones que nos fueran posibles. Siempre creí que queríamos ser como barbie y sus múltiples versiones.Y puedo asegurar también que más de una anhelamos, alguna vez, con ser toda una top model, caminar sobre una pasarela con muchos fotógrafos alrededor, andar sobre enormes tacones y ropa súper fashion… ¿No me crees?...échale un ojo a tus fotos de hace unos cuantos ayeres y verás que en más de una sales posando y robando cámara con tu brillante sonrisa chimuela.Otras niñas quizás sólo jugábamos a ser “grandes”, y

en cuanto mamá se distraía tomábamos sus vestidos y su maquillaje, que aunque no tuviéramos ni la mínima idea de cómo ponérnoslo, nos veíamos hermosas llenas de labial y chapitas.Quizás también alguna vez alucinamos con ser el cantante que todo México esperaba y aunque estuviéramos mega desafinados no le teníamos miedo al ridículo y felices de la vida salíamos en los festivales de la escuela, echábamos nuestros gorgoritos en el coro de la iglesia, o andábamos cante y cante por toda la casa con micrófono en mano. Nuestros papis y la incondicional abuelita formaban parte del club de fans.

Por supuesto que también pudiste ser un pequeñuelo “normal”, y no por que los demás fueran extraterrestres, pero hay peques que no se llevan bien con las cámaras o

simplemente no les late la onda de la artisteada. Creo que realmente no importa qué fue lo que hicimos o deshicimos de niños, lo que importa es... ¿qué tan cerca, o lejos, nos quedamos de esos sueños infantiles? No dejemos que nuestro niño interno sólo salga a divertirse en este mes, hay déjalo vivir, que nos vuelva a enamorar de sus travesuras, que de nueva cuenta nos haga sentir felices sin tener un motivo en específico.Hay que atrevernos a jugar otra vez y todas las veces que queramos, comer golosinas, brincar, gritar, sonreír, y lo más importante…nunca dejar de soñar…como cuando éramos niños.

Bien dicen que recordar es volver a vivir... así que por qué no volvemos al pasado y recordamos esos inigualables tiempos...

Érase una vez....Cuando éramos niños...Tania Martínez Gó[email protected]

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AutocinemasPor: Jaime Said www.saidretro.blogspot.com

Todavía por ahí de 1986, recuerdo que atravesé toda la ciudad, desde el sur hasta el extremo norte donde aún se encontraba resistiéndose a morir en el olvido, el último Autocinema de México.

El Autocinema no era el mejor lugar para ver cine: la luz del cielo no permitía la oscuridad necesaria para ver bien la película, las bocinas que se adaptaban al coche eran monoaurales por lo que el sonido era muy malo, y el ir y venir de gente y autos con las luces prendidas, representaba una constante distracción. Sin embargo, nadie, o casi nadie, iba a los autocinemas a ver precisamente la película. La experiencia de visitar estos sitios acompañado por tu pareja, era única, romántica y entrañable.

Recuerdo que se proyectaban siempre dos películas y había permanencia voluntaria, por lo que nunca dejaban de entrar y salir autos, lo que era una friega para los ilusos que acudían a ese lugar con la intención de ver la película. Por eso ahí había que ir acompañado, ya sea con la novia


o con la familia, siempre con el entendido, que no era el mejor lugar para ver una película, pero sí para pasarla muy bien.

Como les decía, mi última visita (y única) a ese autocinema, fue por ahí de 1985 o quizás 1986. Poco tiempo después, terminaron por cerrar el autocinema y pasó a convertirse en un horrible bazar de autos.

Sin embargo, este no fue el único autocinema que hubo en México. Recuerdo que alguna vez mis papás me llevaron a otro autocinema, que si mal no recuerdo, se encontraba justo donde hoy está Plaza Coyoacán y también existía el Autocinema del Valle, y el Lindavista.

Pues bien, así, un día de pronto, finalmente desaparecieron los autocinemas y, junto con ellos, la incomparable experiencia de “mal” ver una película desde la incomodidad de nuestros autos, pero

en la siempre agradable compañía de nuestras desinhibidas y cariñosas novias.

Ahora lo más parecido es poner la laptop dentro de tu auto mientras te estacionas en el mirador -acompañado de tu pareja- y ver la peli ahí mismo mientras intentas “echar romance”, o te dure la pila de la compu.

En todo caso creo que lo mejor será quedarse con el bello recuerdo de lo que fueron los autocinemas en México...

Cine sobre ruedas


Cuando mis hijos estaban más pequeños no les gustaba salir mucho a la calle porque se aburrían, “no hay nada que hacer” me decían; “¿Cómo es que no hay nada que hacer?” replicaba yo, creatividad es lo que falta.

Había “hoyos”; este era uno de los juegos más emocionantes. En la tierra hacíamos hoyos en línea, uno por jugador, cada quien elegía el suyo, contabas tres pasos grandes (cinco los que éramos pros), y marcabas la línea de tiro; del otro lado del parque era la base. Se trataba de rodar una pelota de esponja a los hoyos y si caía en el tuyo corrías por la pelota mientras los demás literalmente huían a la base del otro lado del parque, tu debías apuntar a uno, aventarle la pelota, si le pegabas podías correr a la base, este debía ir por la pelota y tratar de hacer lo mismo. Ahora, había que regresar a los hoyos pero requería estrategia y mucha habilidad; el que tenía la pelota debía lanzarla hacia arriba, lo más que pudiera, y debías elegir el momento de salir corriendo para tocar tu hoyo porque en cuanto bajara la pelota él te aplicaría el pelotazo de la vida; así que mirabas, arrojaba la bola al cielo, tomabas decisión y… ¡¡¡¡Pegabas la carrera sin poder voltear atrás y oías la bola zumbarte a un costado!!!! ¡No te pegó! Llegaste sano y salvo a la base y los demás vivales venían atrás de ti sin broncas porque el que perdió debía ir a recoger la pelota, ya no tenían broncas. Al perdedor se le ponía “un hijo”; si juntabas tres, te tocaba castigo.

¿Qué tal “carreterita”? Con un gis dibujabas una carretera en la banqueta y le agregabas “trampas” que eran zonas pintadas en su totalidad. El objetivo era llegar a la meta claro está; cada quien debía poner su carro, recuerdo

mi carrito con orgullo: un Fórmula 1, negro con dorado que tenía la calcomanía de JPS, John Player Special; era “EL” carrito. Por cada turno tenías 3 tiros, no podías pisar raya o perdías un turno; si caías en una trampa debías esperar hasta que alguien te sacara por choque, es decir, que el otro carro deba pasar por ahí mismo y solo pueda hacerlo si te saca de la trampa por que le estorbas.

¿Qué decir del “trompo”? Había de madera con punta de clavo chata y con piola (cuerda) que vendían en la “pape”. Dibujabas un círculo en el piso, cada quien ponía un quinto o un cobre (5 o 20 centavos, respectivamente); los grandes de a tostón o peso. El trompo debía quedar dentro del círculo, abrías los dedos como el saludo de Spok y lo levantabas de un solo golpe, lo controlabas girando en la palma de tu mano y lo lanzabas a las monedas, a la que le pegabas tres veces en la misma tirada era tuya. Los “chipocludos” hacían zumbar el trompo al lanzarlo y los increíbles lo lanzaban al aire y ahí mismo lo atrapaban ¡¡¡¡en la palma de su mano!!!!

¿Y cómo olvidar las “canicas”? Recuerdo que con una sola canica podías ganar mínimo 20 incluyendo ágatas, ojitos y hasta bombochas; eran un tesoro invaluable. Podías perder todas las que tuvieras menos tu “tirito”; ese estaba cacarizo y era innegociable porque te acomodabas con él como con la vida misma para recuperar lo perdido.

Al escribir esto me es imposible dejar de recordar, con una mezcla de alegría y nostalgia, a mis amigos de esos tiempos. Es curioso cómo una generación entera dejó de jugar todas estas cosas, no sé cómo pasó esto. Quisiera explicar el tamaño de mi diversión, para que mis hijos probaran por un día lo que en mi vida equivalió a toda una infancia. Hablamos de 3 juegos que el día de hoy representarían un costo de no más de 50 pesos por los tres. ¿Exagero? ¿Qué dice usted? ¿Se requieren juegos de 3 o 4 mil pesos para sacar lo mejor de la infancia de nuestros hijos?

Por: Quick

Creatividad en la infancia


De canicas, trompo y carreterita...


Después de haberse labrado su carrera como cantante de baladas con fondo de piano, Billy Joel adoptó un aire alternativo con Glass Houses, su respuesta al ambiente de new wave que brotaba entonces. Un par de meses después de la publicación, el album supo abrirse paso hasta los puestos más altos de la lista de álbumes pop de Estados Unidos, donde permaneció seis semanas. Combinando su artístico talento para la composición melodiosa con una pasión visceral recién encontrada. Joel disfrutó de un considerable éxito con toda una serie de sencillos de éxito, comenzando con “You May Be Right”, que llgó al No. 7 en el Billboard Top 100, aunque sólo alcanzó el No. 14 en Reino Unido. “It´s Still Rock & Roll To Me” se clasificó en la lista de EE.UU.

1. You May Be Right.................(4:15)

2. Sometimes a Fantasy..........(3:40)

3. Don´t Ask Me Why..............(2:59)

4. It´s Still Rock & Roll to Me...(2:57)

5. All for Leyna........................(4:15)

6. I Don´t Want to be Alone...(3.57)

7. Sleeping With the TV On......(3:02)

8. You Were the One.............(3:25)

9. Close to the Borderline.......(3:47)

10. Through the Long Night..............(5:15)

para proporcionar a Joel su primer sencillo n. 1. “ Sometimes A Fantasy” y “Cétait Toi (You Were The One)” también fueron publicados como sencillos, aunque fue “Sleeping With The Television On”, un tema de álbum solamente, la canción que recibió más alabanzas de la crítica.Aunque era poco probable haber ganado nuevos admiradores entre el nuevo público de la new wave, glass houses constituyó un valiente e impresionante cambio de dirección musical y además demostró la flexibilidad de Joel. Le supuso su quinto Grammy a la mejor Actuación Vocal Masculina de Rock. El álbum fue nominado también para el Grammy al Mejor Disco, pero lo perdió en favor del primer trabajo de Christopher Cross.

Glass HousesDiscos vendidos: 7.100.000 / Año de lanzamiento: Marzo de 1980

NEW CLASSICS



A pesar de que para muchos el título de “Amor eterno” les recuerda una canción de Juan Gabriel, la verdad es que para mí significa una de las mejores -y lacrimógenas- películas de mi adolescencia.

Me refiero a la película “Endless Love” con Brook Shields y Martin Hewitt, dirigida nada más y nada menos que por Franco Zefirelli.

La banda sonora es muy famosa, así como la romantiquísima canción de Lionell Richie y Diana Ross “My Endless Love”. Recuerdo que desde que la escuché se convirtió en una de mis canciones favoritas, al igual que la película; la poníamos al final de las fiestas y nos reuníamos para verla infinidad de veces.

El tema es un amor adolescente (ella tiene sólo 15 y él 17 años), que retrata muy bien las diferentes etapas y formas de

amar de sus personajes. La lucha y dificultades que tienen que pasar para estar juntos, algo con lo que nos identificamos en nuestra adolescencia, ya que todos sentimos que amamos como locos y también pensamos que fuimos los protagonistas de algún tipo de “amor imposible”.

La escena de la fiesta en la casa de Jade (Brook Shields), donde ella está en los brazos de su padre mientras el novio la mira desde la escalera es muy significativa. Recuerdo la situación donde ella escoge entre ambos y va hacia el novio para abrazarlo y con ello decirle todo lo que las palabras no pueden hacer.

Los padres de Jade (el personaje de Brooke Shields) son muy liberales, y la madre es un hermoso y alivianado personaje, representado por la gran actriz Shirley Knight. La relación con su esposo pasa por muchas crisis y ella sigue creyendo en el amor y apoyando a su hija y David (el galán Martin Hewitt).

Cortesía: www.cine80s.com


Hay una escena en particular, en la que después de la fiesta él se queda a dormir en la sala. ÉL está allí, frente a la chimenea esperando que ella baje (cuando ya

todos se han dormido), mientras su pecho comienza a latir con más fuerza y a respirar acelerado a cada paso que ella baja los escalones. La emoción de ese

encuentro es sumamente especial. Es allí donde se entregan de una forma total, inocente.

También recuerdo lo impactante que resultó ver que la mamá de ella los descubre en silencio. En ese momento pensé que se armaría un escándalo, pero la señora se enternece de tal manera que solamente los observa en silencio y sube de nuevo sin hacer ruido. Supongo que su hija representa lo que ella ya ha perdido, esa pasión juvenil, ese amor romántico, mismo que finalmente la hace ir a buscar los brazos de su esposo después de lo que vio en la chimenea.

La película no tiene un final feliz. Si bien en un primer momento los padres y la familia de Jade apoyaban esta relación entre adolescentes, se

convierte en un problema cuando la joven deja de dormir por trastornos del sueño. El padre de Jade los quiere separar, el hermano de ella apoya

esa opción y los alejan, lo que enloquece al pobre David al punto de que, aconsejado por un amigo, va a quemar la casa de Jade para luego hacerse el

héroe, lo que le vale un tiempo en un centro de reclusión psiquiátrica.

El destino se seguirá encargando de jugarles malas pasadas, y el obsesionado y atormentado David termina separado definitivamente de su bella Jade.

Es una hermosa película, con mucha tela de dónde cortar por todos los temas que aborda, desde el amor hasta la obsesión.

Muy recomendable, sobre todo, por todo el poder de evocación que tiene una película que nos hizo soñar y sufrir mientras el soundtrack nos llenaba los oídos de belleza y del dolor de un corazón roto. Como el que todos hemos sentido alguna vez.

1. Endless Love L. Richie, DianaRoss

2. Dreaming of You L. Richie, DianaRoss

3. I Was Made for Lovin’ You Kiss

4. Dreamin’ Leo Sayer

5. Endless Love [Instrument.] L. Richie

6. Dreaming of You T. McClary

7. Heart Song J. Tunick

8. David Goes to Jade’s House J. Tunick

9. David and Jade Making Love J. Tunick

10.David at the Institution J. Tunick

Las caciones incluidas en la banda sonora son:


Choque del MetroEl 20 de octubre de 1975, dos trenes del “Metro” chocaron en la estación Viaducto, lo que causó 31 muertos y 71 heridos. Una “Comisión Especial” culpó al operador de uno de los trenes del accidente y omitió fincar responsabilidades al Sistema de Transporte Colectivo, por posponer la compra de un sistema de pilotaje automático.

Ese lunes particularmente nublado de 1975, cuando nadie se esperaba que un boleto del Metro le cambiara la vida, figura entre los registros de las más grandes tragedias del transporte subterráneo en el mundo, pero en México ha sido casi olvidado.

“Todo estaba normal hasta que el convoy de adelante comenzó a pare y pare”, dijo el operador Carlos Fernández Sánchez, de 21 años, aquella mañana del 20 de octubre. Había salido de Tacuba, línea 2, alrededor de las 9:05 de la mañana. Ya no era hora pico, pero cada uno de los carros del convoy llevaba aún entre 120 y 130 personas.

Alrededor de las 9:36, el convoy tripulado por Fernández Sánchez, se detuvo en Chabacano. Una estación adelante, el tren número 08, conducido por Alfonso Sánchez Martínez, otra vez paraba su corrida, porque la palanca de emergencia del carro número 06 había sido accionada, como ya había ocurrido antes en Hidalgo, Bellas Artes, Allende y Pino Suárez.

“Escuché con toda claridad y perfectamente que el puesto de control ordenó al tren de atrás que no avanzara, que debía detenerse de inmediato”, declaró Alfonso Sánchez. El operador amarró su tren, bajó de la cabina y se dispuso a desactivar la palanca.



Rodolfo Luis Flores Gutiérrez, encargado esa mañana de regular las corridas de la línea 2 desde el mando central, dijo haber ordenado al operador del carro número 10 detenerse, “pero no escuché respuesta del conductor y se me hizo raro porque era un hombre experimentado, con tres años de servicio como operario”. “Como el tren 08 se iba deteniendo, permití que el convoy que iba atrás se acercara a una estación de distancia, cuando lo normal eran dos, porque la demanda de pasaje era alta”, dijo Flores Gutiérrez. Luego se “distrajo con otras cosas”. Fernández Sánchez comenzó la marcha del tren número 10 y poco a poco elevó la velocidad. Las luces de seguridad estaban en “vía libre”. Al subir la lomita del Viaducto Miguel Alemán no vio que había un tren estacionado en la siguiente estación. Cuando llegó a la cumbre del promontorio lo notó.

“Yo vi el tren en Viaducto, bajando el puente; el semáforo 1-2 me indicó rojo, quise frenar y no pude. El tren tendría que haberse frenado automáticamente, pero tampoco”, dijo. El convoy iba a unos 70 kilómetros por hora; la inercia y el peso le ganaron.

A las 9:40 el primer vagón del tren número 10 se estrelló contra el último vagón del tren número 08, provocando que ambos carros se elevaran, rompieran el techo del andén y quedaran “mirando hacia el cielo” dejando por lo menos 31 muertos, unos 70 heridos de gravedad, otro centenar de heridos leves y la vida trastocada para cientos de personas.

Oficialmente la colisión se debió a un error del conductor, un hombre de extracción humilde quien purgó una pena de entre nueve y diez años, primero en la Penitenciaría de Lecumberri y luego en el Reclusorio Norte, de donde salió de ahí para borrar su rastro. Extraoficialmente, la defensa del inculpado y el sindicato del Metro denunciaron una serie de inconsistencias e irregularidades, pero fueron apabullados por el México de los años 70: una “Comisión Especial” —conformada por el procurador Horacio Castellanos Coutiño, el director del Metro; Jorge Espinosa Ulloa, y el Secretario General de Gobierno del Distrito Federal— creada por orden del presidente Luis Echeverría, que encontró un único culpable, en apenas cinco días.

Quien busque los expedientes perdidos de la tragedia del Metro, tras más de treinta años de olvido, es posible que sólo encuentre silencio. Muchos de los protagonistas han muerto. Otros se perdieron de la mirada pública.

En el Archivo General de la Nación, que resguarda los archivos oficiales de la presidencia de Echeverría, no hay documentos relacionados con el caso. En el Archivo Histórico de la Ciudad de México, donde debía estar el expediente penal completo del conductor, sólo hay un oficio de media hoja carta. Para la oficina de prensa del Metro, el asunto es irrelevante. “Miramos para adelante”, dijeron.

Aquella tragedia, que trastocó la vida de la ciudad de México, ocurrió un lunes particularmente nublado. Olvidado.


Cantinflas con su personal bigote, sus pantalones a media altura, su ropa haraposa, su pañuelo anudado al cuello y su peculiar manera de hablar se convirtió en dibujos animados de una serie llamada CANTINFLAS SHOW.

Fueron aventuras de animación que el auténtico Mario Moreno ideó en la década de 1970 para los niños y diseñadas por el animador español José Luis Moro, creador de “La familia Telerín” (1965), quien se encargó del episodio piloto en el año 1972 mientras que gran parte de la serie se realizó en la década de 1980, en los legendarios estudios de Hanna-Barbera.

En CANTINFLAS SHOW nos encontramos el humor típico de Cantinflas y su manera de hablar rápida e incongruente que alcanzó tal éxito entre el

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público de habla hispana hasta el punto que la Real Academia Española reconoció el verbo cantinflear como parte de su contenido.

La serie va dirigida a un público infantil quien a través de Cantinflas va introduciendose en contenidos educativos, dividiendo sus episodios entre temas científicos, geográficos y artísticos donde comparte aventuras con artistas como Leonardo da Vinci quien se encuentra desesperado porque la Gioconda no sonríe hasta que llega, naturalmente, Cantinflas; Rembrandt, maestro del arte barroco holandés; Pablo Ruiz Picasso quien aparece al inicio como un fantasma y Cantinflas llega a posar para el; Francisco de Goya y su malhumor al ver a Cantinflas tratando de imitarlo en su arte, etc.

En los episodios también explora los secretos de la electricidad, la energía atómica, el petróleo, la comunicación, la imagen... y realiza viajes a la Torre Eiffel, la Estatua de la Libertad, el Partenón en Grecia, la Gran Muralla China, la Torre de Londres, la Catedral de Notre Dame, el Muro de los Lamentos, los canales de Venecia... En el mundo mágico de los dibujos animados de Cantinflas todo es posible.

Las aventuras de Cantinflas hacen que el acercamiento a los hechos no sea tal como se presentan en los libros de historia pero es una forma muy divertida de interesar a los niños en la cultura y los acontecimientos de la historia.

En CANTINFLAS SHOW siempre encontramos un mensaje de civismo y una moraleja que sirve de ejemplo para ser mejores personas.

Y en esta serie de dibujos animados es precisamente el propio Cantinflas quien realiza las narraciones.

La carcajada, la risa, la sonrisa. Asi es como Cantinflas nos enseña, como nos recuerda Mario Moreno que “La esencia del universo es la alegría, la

buena disposición, lo positivo. El buen humor no tiene sistemas ni técnicas, es una

sensibilidad humana que expresa un momento apropiado. Y

si el mundo aprendiera a usar más esta sensibilidad, creo que todo sería mejor. Disminuirían las diferencias que alejan a la gente”.



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QUICK MAGAZINE 4

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